Piden a Bonomi que lo saque de allí porque “corre peligro”.

Unas 20 personas se concentraron ante el Ministerio del Interior para reclamar que el secretario general del Nuevo Partido Comunista, Marcelo Sánchez, procesado por lesiones personales en el caso de la muerte de Andrés Pereira, no fuera trasladado al Comcar, donde ayer ingresó para cumplir la sentencia.

Presentaron una carta dirigida al ministro del Interior, Eduardo Bonomi, en la que sostienen la vida de su líder corre riesgo en ese centro carcelario.

"Si algo llegase a ocurrir contra la integridad física o moral del Secretario General, queremos transmitirle al compañero, señor ministro Eduardo Bonomi, y distintas autoridades de este Ministerio, que los haremos responsables de todo lo que acontezca ante esta situación demás dramática a la que puede ser expuesto nuestro compañero", indica la misiva.

Los manifestantes mostraron pancartas en las que sostenían que Marcelo Sánchez es "un preso político" cuya vida está en peligro.

En un comunicado remitido a la opinión pública la dirección del sector político califica los procesamientos como "muy graves". "¡No a la criminalización de los comunistas! ¡Liberar a los compañeros injustamente procesados!", indica la dirección del NPC.

El abogado de Sánchez, Andrés Serries, teme por la integridad de su defendido. "La vida de este hombre corre riesgo inminente ahí, está en la boca del lobo con la trascendencia pública que tuvo el caso. Conozco bien cómo funciona el sistema carcelario y esto puede ser de un día para el otro", declaró a Montevideo Portal.

La ubicación de los procesados con prisión es una responsabilidad directa del Instituto Nacional de Rehabilitación, una dependencia del Ministerio del Interior. Una vez que la Justicia resuelve el envío a prisión, el organismo evalúa la situación del procesado y define el lugar al que lo remite.

Andrés Pereira murió en un campamento del NPC realizado en Punta Espinillo a fines de febrero de 2014. Tenía 16 años y lo acusaron de haber hurtado dinero, por lo que lo persiguieron y golpearon. Su cuerpo apareció tres años después de haber salido de su casa rumbo al campamento.

Sánchez fue procesado con prisión el 28 de julio por decisión de la jueza Odriozola tras las indagatorias que también determinaron el envío de otras tres personas a la cárcel: el cocinero del campamento, por violencia privada, y un matrimonio por falso testimonio. Hasta ahora no hay procesados por homicidio.

El fallo de la jueza Odriozola señala que se resolvió el procesamiento con prisión de los cuatro militantes, a pesar de ser primarios, debido a "la gravedad de la conducta de cada uno de ellos" y que "a esta altura del proceso no es posible prever que no habrá de recaer pena de penitenciaria".

RECLAMO