Una de las estrategias más conocidas para mantener una alimentación balanceada consiste en asegurarse de que el plato tenga, al menos, tres colores diferentes. Gracias a las verduras, hay un color que es muy fácil de incorporar en la dieta: el verde.

Las hortalizas de hoja verde son alimentos que se distinguen por su color intenso, el cual adquieren por la presencia de clorofila. Éstas aportan múltiples beneficios para el organismo, ya que contienen pocas calorías y son fuente de minerales (como calcio, hierro, magnesio y potasio), fibra y vitaminas (A, C, B, E y K) que nos ayudan a mantenernos saludables y a combatir enfermedades.

Pepino

Es un alimento rico en fibra y agua, por lo que acelera la eliminación de toxinas en la sangre, disuelve cálculos renales, facilita la digestión y produce la sensación de saciedad. Además, es muy bueno para el cerebro, pues contiene flavonol, un antioxidante que favorece la conectividad neuronal. También ayuda a combatir el estrés gracias a sus altos niveles de vitaminas del grupo B, las cuales son muy efectivas para relajar el sistema nervioso.

Pimiento verde

Es considerado como un gran antioxidante que refuerza el sistema inmunológico, previene las enfermedades degenerativas y ayuda a quemar grasa. También es una buena fuente de fibra y favorece en la disminución del colesterol malo en la sangre. Asimismo, diversos estudios señalan que decrece los riesgos de cáncer de colon, puesto que reduce el contacto entre las células de este órgano y las toxinas cancerígenas albergadas en los intestinos.

Brócoli

Este vegetal es sumamente importante en la dieta, pues ayuda en la prevención del cáncer, acelera la regeneración celular y disminuye la inflamación. Igualmente, es un alimento ideal para combatir la anemia, ya que contiene altos porcentajes de hierro, clorofila y ácido fólico. También protege el corazón, puesto que ayuda a eliminar el colesterol malo del organismo.

Espinaca

Es ideal para los pacientes diabéticos que buscan cuidar su salud, pues tiene un bajo índice glucémico, es libre de almidones y bajo en calorías, rica en vitaminas y minerales. De igual manera, combate el deterioro celular y fortalece al cuerpo contra enfermedades degenerativas, como el Alzheimer. Gracias a sus minerales (potasio, magnesio y calcio), refuerza la conectividad cerebral. Adicionalmente, es un aliado excelente contra el estrés, la fatiga y la pesadez.

Lechuga

Definitivamente, la lechuga es una de las verduras más populares a nivel mundial, probablemente por sus propiedades, pues es diurética, lo que evita la retención de líquidos. Además, al contener flavonoides, fundamentalmente quercetina, previene las enfermedades cardiacas. También estimula la correcta función de los riñones y previene infecciones del sistema urinario. La lechuga posee lactucarium, que actúa como calmante sobre el sistema nervioso, favoreciendo así a una mejor calidad del sueño.

(Por El Comercio GDA)

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