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Un asesor "top" de proyectos en el Este

Casares. Es uruguayo y entre otras cosas, le alquiló la casa a Ralph Lauren

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José Luis Bello

FEDERICA NARANCIO

Pablo Casares (61) es uruguayo y uno de los operadores inmobiliarios "top" de Buenos Aires. Participa en proyectos como el edificio Acqua, del arquitecto Rafael Viñoly. El exitoso empresario compartió con El País varias horas de su día en Punta.

El celular de Pablo suena cada cinco minutos pero él no pierde el buen humor. Con diligencia resuelve pequeños obstáculos del día a día: "Ahora me avisaron que llegaron los pedidos de Ralph Lauren (creador de la marca Polo) a la casa que él alquiló en La Barra pero no le quieren abrir a los muchachos porque no era la hora consignada", explica.

Pablo se define actualmente como un "advisor", esto es, asesora a empresarios dónde y cómo invertir en tierras y propiedades que a largo plazo se valorizarán mucho más.

Es, además, uno de los empresarios inmobiliarios más importantes de Buenos Aires: le vendió casas a Susana Giménez, la mitad de las casas que están en el barrio de Palermo Chico (compró la primera en 1985 a U$S 160.000 y en 1999 la vendió en U$S 2.000.000) e incluso vendió la casa de la escritora Victoria Ocampo a la empresaria Amalia Fortabat para la creación el Fondo Nacional de las Artes, algo que asegura fue "muy gratificante".

Eso sin contar los proyectos en los que participa en Punta del Este, el más importante de ellos el edificio Acqua, a cargo del arquitecto uruguayo Rafael Viñoly, cuyo apartamento más caro costará cerca de U$S 6.000.000. "Cuando me llamaron para trabajar en Acqua, sentí que ganaba el Premio Nobel", asegura.

En la Posta del Cangrejo, donde almuerza casi todos los días, tiene una mesa asignada en la terraza. "Me gusta tomar un rico vino y partirme la cabeza al sol, como Pablo Neruda", explica. Se da pequeños lujos: un buen almuerzo, vino nacional, un habano y un auto con chofer que prende el aire acondicionado cinco minutos antes de que ingrese.

Tiene una vida interesante: es un empresario exitoso, que triunfó en Buenos Aires siendo uruguayo, con una familia bien constituida y muchos afectos. La farándula, dice, no le interesa, y él es una persona de perfil bajo, que prefiere no alardear sobre sus éxitos ya que fueron fruto de años de trabajo.

También hace énfasis en ser profesional y no intimar con clientes. "Con Susana (Giménez) tenemos muy buena relación. Ella me envía regalos a fin de año, si me ve en una reunión siempre viene a saludarme. Pero fijate que le vendí la casa en Punta del Este, La Mary (una chacra de 7 hectáreas en Rincón del Indio), y no la fui a visitar a menos que invite, porque me parece que no sería correcto", cuenta.

Pero para ser "advisor", indudablemente se debe tener mucha paciencia: "la parte económica es la menos importante, porque con la gente uno debe tener tacto, termina cumpliendo con el rol de terapeuta o consejero", dice Pablo.

Receloso de la intimidad de sus clientes, prefiere no dar nombres. Sin embargo, entre bocados, desliza que quizá Mirtha Legrand y Susana Giménez estarían interesadas en comprar un apartamento en Acqua, y que él mismo quiere convencer a Viñoly de que adquiera uno, ya que sería "el broche de oro" tener al creador de la obra allí.

Según estima Pablo, son proyectos como Acqua los que elevarán el "status" de Punta del Este. Asegura, además, que las inversiones inmobiliarias de más desarrollo en Punta del Este se harán en terrenos con "accidentes geográficos favorables" (un cerro con una vista única o una laguna, por ejemplo) de Punta Ballena, Punta Piedras, José Ignacio y Laguna Garzón, "que es el futuro".

Al final de la conversación es inevitable preguntarle cuáles fueron los misteriosos pedidos que hizo Ralph Lauren antes de su llegada al balneario. "Muchas velas, flores y música new age", revela. Sencillo, como él.

Proyectos de lujo en Punta del Este

Entre los proyectos en los que participa Pablo Casares se encuentra, además del edificio Acqua, los Castillos de las Cumbres de Punta Ballena, Laguna Escondida en José Ignacio, Pueblo Coyote - Haciendas del Este y Occidente Village en Punta Piedras, y en La Barra un emprendimiento de Carlos Iglesias, hermano de Julio Iglesias.

En Camino Lussich, se construirán cinco castillos de 2 mil metros cuadrados, cada uno con su viña y cava particular. Tendrá una inversión de aproximadamente U$S 10.000.000.

En Laguna Escondida se harán 200 casas de lujo en un terreno que tiene un total de 120 hectáreas.

En Punta Piedras, el emprendimiento de Pueblo Coyote consta de seis casas de 700 metros cuadrados que tendrán cinco hectáreas de tierra, y Occidente Village, que son cinco casas para alquilar por día a U$S 1.000 puestas con servicio "de hotel cinco estrellas".

El proyecto de Carlos Iglesias serán casas con terrenos donde se podrán hacer canchas de polo y golf.

"Fue un buen año para mÍ"

Pablo se crió en Montevideo, en el Prado, y fue al colegio Seminario. Según dice, proviene de una familia de "humanistas", con una biblioteca importante en la casa, rodeados de cultura (entre sus hermanos, hoy uno es pintor y el otro librero) y con la ayuda de una madre "muy inteligente".

Casado desde hace más de 30 años con una jueza argentina y con 4 hijas, se considera muy afortunado. A los 21 años, se fue a vivir a Buenos Aires y allí comenzó su trabajo como operador inmobiliario.

De las 300 casas que hay en el barrio Palermo Chico, él vendió 190 desde 1985. "La casa de mayor valor que vendí hasta ahora fue de U$S 4.500.000", cuenta. Según dice, el secreto es ofrecerle al cliente algo distinto, original, cuyo valor se duplicará o triplicará con los años.

De aquí al 2009, está involucrado en varios importantes proyectos, en especial en Punta del Este. Pese a su éxito, quiere de a poco volver a asentarse en el país con su familia.

"Lo bueno a esta altura de mi vida es que puedo disponer de mi tiempo como quiero, soy libre en ese sentido", asegura.

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