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Senado aprobó aumento de penas mínimas por tráfico de pasta base

Seguridad. La oposición votó, pero marcó que la medida es un "adefesio"

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El Senado aprobó la primera iniciativa contra la delincuencia. Aunque la considera un "adefesio" jurídico, la oposición la acompañó pidiendo aumentar, además de las mínimas, las penas máximas para traficantes de pasta base.

Aunque terminó votándose por unanimidad, el proyecto de aumento de penas mínimas para traficantes de pasta base no resultó un trago fácil para la bancada del Frente Amplio en el Senado. Es la primera de las 15 medidas anunciadas por el gobierno sobre seguridad pública, y, para el oficialismo, más allá de la "desprolijidad" de alguna de sus disposiciones, debe ser vista como "una señal" de que con los traficantes de pasta base de cocaína "no habrá contemplaciones".

A pedido del Partido Colorado, luego apoyado también por el Partido Nacional, el Frente Amplio accedió a sumar a los senadores, diputados, ministros y subsecretarios, en su condición de funcionario público, entre los sujetos pasibles de ver agravada su eventual pena en un caso de obtención de un beneficio vinculado con el tráfico de pasta base, medida que en principio alcanzaba a policías y militares afectados a custodiar las cárceles, y a jueces, fiscales, actuarios, alguaciles, e integrantes de la DGI y de Aduanas que intervinieran en esos casos.

Con estas medidas, el Poder Ejecutivo quiere "dar una señal" de que con la pasta base "no vamos a tener contemplaciones", dijo en la sesión del Senado el senador oficialista Rafael Michelini.

El senador colorado Ope Pasquet, dijo en sala que si se les exigirá una determinada conducta a los actores del sistema judicial, "los legisladores tenemos que dar el ejemplo".

PENAS MÁXIMAS. Pasquet sostuvo que si bien la ley aumenta las penas mínimas, lo que considera positivo, "es un error" sin embargo dejar las penas máximas como están, porque "seguramente habrá casos que requieran de una mayor sanción".

Michelini explicó a Pasquet que pese a no aumentarse las penas máximas, "los traficantes de porte no van a salir porque su pena será no excarcelable", tal cual establece el proyecto de ley del gobierno.

Más tarde, el senador colorado Pedro Bordaberry afirmó que esta ley "revela un cambio positivo". Según cifras oficiales, en 2004 había 187 consumidores de pasta base y hoy son más de 30.000. "Es un problema a encarar", subrayó.

"Esta es una norma que no atiende a la globalidad del problema. Con esto solo no alcanza", apuntó Bordaberry, quien vinculó el problema del consumo de pasta base a las acciones delictivas violentas.

Luego, la senadora oficialista Constanza Moreira (Espacio 609) pidió "no estigmatizar a los menores de los asentamientos".

En los días de negociación previo a que el proyecto llegara al plenario, Moreira trató de oponerse al aumento de las penas mínimas para los traficantes en la bancada del Frente Amplio, pero quedó en posición minoritaria y debió acatar.

ADEFESIO. Bordaberry recordó que según cifras del observatorio privado Fundapro, el 10% de menores que delinquen lo hace por la pasta base y que el 54% no tiene necesidad de hacerlo.

Los nacionalistas Francisco Gallinal y Carlos Moreira pidieron la vuelta a comisión del proyecto porque rechazan las últimas modificaciones sobre los mínimos de la pena y las penas sustitutivas. "Esto modifica el equilibrio en el orden jurídico establecido", sostuvo Moreira, porque recordó que con esta ley se establecen penas alternativas para delitos que tendrán condena de penitenciaría, mientras el Código Penal las señala como alternativa para las penas de prisión.

Michelini admitió que con esta ley se está "tensionando el Código Penal".

Volvió a intervenir para aclarar que esta ley "no es la norma perfecta, pero le deja al juez la posibilidad de poner penas alternativas a una persona que quizás no sabía que llevaba pasta base de una boca a otra".

Para Gallinal, la iniciativa es "un adefesio jurídico".

"Que titule así El País"

El senador Rafael Michelini discutió con la oposición sobre la precisión jurídica del proyecto. "Es desprolijo", se le apuntó desde la oposición y fuera de micrófono. "Es desprolijo, que quiere que le diga, pero que lo titule El País", apuntó el senador del Nuevo Espacio.

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