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Síntomas preocupantes en el sistema de salud

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por Martín Aguirre

¿Qué pasa con la salud? Esa es la pregunta que se puede hacer cualquier ciudadano al leer los titulares diarios de la prensa. Emergencia sanitaria, problemas con los CTI, conflictos con las emergencias móviles y de nuevo con los anestesistas, tensiones entre las jerarquías de ASSE, demandas laborales millonarias, relevos en la dirección de varios hospitales, y finalmente en el propio ministerio. Esto sin mencionar los aspectos financieros ni la saturación que comienza a denunciarse en el sistema mutual privado. ¿Dolores naturales ante el cambio brusco de la reforma del 2008? ¿O señales de alerta de problemas de diseño y gestión?

La reforma de la salud fue uno de los ejes centrales del primer gobierno frentista. El proyecto, inspirado en el sistema que se aplica en Israel, fue catalogado por el expresidente Tabaré Vázquez como una "democratización de la salud". El exministro Olesker (su gran ideólogo) fue más allá al decir que es una reforma "protosocialista que crea condiciones para ir transformando la sociedad".

Está claro con estas palabras que ambición no fue lo que faltó en este proceso. Extendió en forma muy importante la cobertura de salud, al implicar el paso de miles de personas al sistema privado mutual (algo un tanto paradójico en una reforma de izquierda) con el consiguiente "alivio" al sistema público. Como contrapartida significó un proceso de centralización y férreo control estatal sobre estas instituciones privadas. Asimismo cargó a las mutualistas de golpe con un número de afiliados enorme, lo cual pone en jaque su capacidad de atención y de inversión a futuro.

Sin embargo, hoy en día es en el sector público en el que están surgiendo más inconvenientes. Un sistema que pasó a tener que atender a un universo mucho menor de personas, y que tuvo significativos aumentos presupuestales. Allí se han dado problemas de gestión y relacionamiento, particularmente motivados por la concepción acerca de cómo debe funcionar el sistema que enarbola su actual titular, Mario Córdoba, a quien el presidente Mujica ha catalogado como "un poeta de la medicina, con vetas de Quijote". También por la integración al directorio del organismo de figuras provenientes del ámbito sindical, que han tenido un relacionamiento complejo con los demás actores del sistema. El propio Vázquez sostenía hace poco que la reforma "no deja contentos a todos", pero la ola de conflictos que enfrenta hoy el proceso parece exceder el natural pataleo de algunos intereses creados afectados. Sin ir más lejos, un informe de la última edición de Brecha denuncia "carencias en el diseño programático, y de gestión" y que hay "un discurso sin contenido" en la dirección de la salud pública.

Además, y lejos de verse satisfechos por los altos cargos que hoy ocupan varios exdirigentes sindicales, los gremios han elevado la apuesta y la relación con el gobierno sigue siendo difícil. El nuevo ministro Venegas enfrentó una huelga antes de 24 horas de asumido, en medio de un conflicto en el que el sindicato exige más de 2 mil nuevos cargos y eliminar las tercerizaciones. Como si fuera poco este panorama, en el continuo cambio de autoridades de hospitales ha sobrevolado siempre el rumor de ajustes de cuentas y revanchas entre los sectores afines al expresidente Vázquez y los que están más cercanos a su sucesor, José Mujica.

Si bien es aún pronto para hacer un balance realista sobre un proceso de cambio tan drástico, y por encima de las posturas ideológicas que el mismo implica, parece evidente que un control tan centralista y "político" sobre la salud, está generando déficits importantes en materia de gestión. Y si el gobierno no enfoca esos déficits con efectividad, si prioriza los grandes objetivos ideológicos y descuida los resultados prácticos, la ciudadanía le puede cobrar la cuenta.

La frase.

"Al compañero le tiramos una changa, en un partido que es complejo. (José Mujica sobre el nuevo ministro J. Venegas).

El dato.

Desde que se implementó la reforma de la salud unos 400 mil niños dejaron ASSE para pasar al sistema mutual.

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