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La Conferencia Episcopal del Uruguay resolvió ayer que todos los católicos que promuevan o voten la ley que despenaliza el aborto no podrán acercarse a la comunión eucarística.

La Conferencia Episcopal del Uruguay analizó ayer la situación de los legisladores católicos que votaron a favor del proyecto de ley de salud sexual y reproductiva que legaliza el aborto, así como la de otros fieles que lo apoyaron e impulsaron.

Los obispos reunidos en Florida coincidieron en que, de acuerdo a los cánones 1341 y 1398 del Código de Derecho Canónico, quienes optaron por apoyar esta iniciativa se alejaron de la Iglesia y por ende están impedidos de recibir los sacramentos.

El arzobispo de Montevideo, Nicolás Cotugno, había adelantado el domingo 2 a El País que los legisladores que apoyaran la despenalización del aborto, quedarían excomulgados "ipso facto", es decir, en el acto, si había acuerdo entre los obispos uruguayos y con el papa Benedicto XVI.

"En relación a los fieles católicos que promueven y/o votan una ley favorecedora del aborto, les recordamos que quien actúa así rompe el vínculo que lo une a Cristo en la Iglesia. Mientras no cambie su posición queda impedido de acercarse a la Comunión eucarística", señala el comunicado de la Conferencia Episcopal difundido ayer, dos días después de que los diputados aprobaran la despenalización del aborto.

El mismo texto sostiene que el valor de la vida humana está por encima de todos los intereses y que "ninguna ley honesta puede justificar eliminar un ser indefenso que tiene derecho a la vida y a nacer".

Los obispos también agradecieron a quienes defendieron este "valor básico", oponiéndose al proyecto que en la madrugada del miércoles aprobó la Cámara de Diputados, y alertaron sobre "posturas que manipulan y oscurecen la verdad fundamental del derecho a la vida anteponiendo otros intereses o situaciones, sin tomar en cuenta ni la ciencia ni la conciencia ética".

Al mismo tiempo indicaron que Uruguay debe multiplicar las señales de amparo a la vida humana en medio de la emigración y la delicada situación demográfica que puede comprometer el futuro.

"El bienestar de nuestro pueblo requiere hijos e hijas que alegren los hogares, colmen las aulas y espacios educativos o de esparcimiento. Estamos a favor del desarrollo integral de la vida humana, que como obispos católicos miramos desde la perspectiva de Jesucristo, que ha venido al mundo para traer vida digna y abundante", concluyeron los obispos uruguayos.

Pese al anuncio del presidente de la República, Tabaré Vázquez, de que vetará la ley que legaliza el aborto, el Parlamento sigue adelante con el proyecto de ley de salud sexual y reproductiva que en pocos días será estudiado por la Cámara de Senadores.

El texto, que el miércoles fue aprobado por la Cámara de Diputados, sufrió modificaciones por lo que debe volver a ser estudiado por lo senadores que lo habían votado hace un año. El artículo segundo, que establece que los derechos sexuales y reproductivos son derechos humanos universales, fue votado en forma negativa por 48 en 97 y por eso el proyecto debe volver al Senado. En esta votación fue clave el diputado Álvaro Vega (MPP), que no acompañó al resto de su bancada.

Entre los senadores del FA prima la idea de aprobar rápidamente las modificaciones a este texto para evitar que deba ser tratado en la Asamblea General donde la iniciativa correría riesgo pues se requieren dos tercios de los votos.

El proyecto de ley de salud sexual y reproductivo ya fue aprobado en ambas cámaras, con votaciones muy ajustadas. En la Cámara de Diputados se aprobó en la madrugada del miércoles, por 49 votos contra 48. En el Frente Amplio hubo 49 votos a favor (incluyendo los diputados del MPP Álvaro Vega e Ivonne Passada, que en principio iban a votar negativo el proyecto en general) y dos votos en contra: Juan Andrés Roballo (Alianza Progresista) y Víctor Semproni (MPP). El diputado de Artigas, Carlos Maseda (Vertiente Artiguista) y el colorado Washington Abdala se retiraron de sala. Los 48 votos en contra pertenecen a todos los diputados blancos, colorados y el del Partido Independiente. El Senado en tanto aprobó el proyecto hace poco más de un año, el 6 de noviembre de 2007, con 18 votos a favor y 13 en contra. Avalaron la iniciativa todos los legisladores del FA -incluso el senador Alberto Cid mandatado por su sector-, y los opositores Julio María Sanguinetti (Partido Colorado) y Julio Lara (Partido Nacional).