MONTEVIDEO

Desierto, estepa, tundra, taiga, pradera, bosque y selvas con la vegetación típica de cada ecosistema, junto con colores, aromas, sonidos y la construcción de relieves y rocas. Todo esto en un mismo lugar: el parque temático  Biomas, ubicado al oeste de Montevideo.

Se trata de un paseo para toda la familia al aire libre, algo que en tiempos de coronavirus con las restricciones establecidas por las autoridades es ideal.
El parque funciona desde el año 2017 y estuvo varios meses cerrado al público por la pandemia, pero desde diciembre pasado reabrió sus puertas y con el comienzo de clases son cada vez más las familias o grupos que llegan al lugar.

El origen de esta iniciativa se remonta hace más de 20 años, cuando su creador, Leonardo Arias, ingeniero paisajista, comenzó a juntar semillas de todas partes del mundo. Esa recolección de plantas y árboles de los lugares más diferentes del planeta fue el puntapié inicial para la creación de este parque temático. El espacio nació como respuesta a la necesidad de una nueva forma de educar y aprender de manera interactiva y tangible sobre los paisajes bioclimáticos más importantes del mundo.

Arias contó a El País que luego de la reapertura las recorridas se realizan en grupos más reducidos: “En el caso de las visitas familiares recibimos solo una o dos familias por hora. Realizamos agenda previa para evitar aglomeraciones. Y todas las recorridas se realizan con las recomendaciones sanitarias como mascarilla, disponibilidad de alcohol en gel y distanciamiento del guía”.

El parque está dividido en dos. Por un lado “Biomas”, que recrea en 16.000 metros cuadrados los principales ecosistemas del mundo y, por otro, “Flora”, que apunta a reconocer los paisajes naturales del Uruguay, su ecosistemas y monte nativo a través de 8.000 metros cuadrados y 200 especies vegetales diferentes. En total se encuentran más de 11.000 plantas. También está la atracción llamada “Viaje espacial”.

“En Biomas están representados todos los paisajes bioclimáticos del mundo. Podrán ver un desierto, con todas las características de fauna y flora, y también una selva con una cascada y una exuberante vegetación, en un invernáculo bajo tierra de 700 metros cuadrados. En Parque Flora, recorremos todos los ecosistemas o paisajes del Uruguay, así que recorremos el monte ribereño en bote, entraremos al monte serrano, veremos lo que es una quebrada, la pradera, el monte parque, los humedales y palmares y por último, el Viaje Espacial, que es un simulacro de vuelo por el espacio. Subimos a un transbordador que nos llevará a la Estación Espacial Internacional y, de ahí, subiremos a una nave que nos llevará a recorrer el sistema solar desde Plutón hasta Mercurio. Todos los sectores con diferentes efectos de luces y sonidos”, detalló Arias.

Un guía especializado se encarga de realizar el recorrido, ofreciendo con un gran sentido lúdico, las características geográficas, edafológicas, biológicas y curiosidades de cada especie. El paisajista señaló que “los guías que realizan las recorridas con escolares y liceales están altamente capacitados técnicamente y como educadores. Las recorridas se adaptan al perfil del grupo. Tenemos guías educadores para inicial, guías para escolares y guías para liceales. Entre ellos hay ingenieros agrónomos, veterinarios, biólogos y estudiantes avanzados de las carreras de agronomía, ciencias biológicas, y profesores de IPA”.

Las recorridas por cada parque llevan aproximadamente una hora por los 600 metros de cada recorrido. El grupo marca el ritmo y la profundidad de la información. “Creemos que el proceso de aprendizaje está dado fundamentalmente por las emociones, por lo que buscamos que el visitante pueda sorprenderse, regocijarse y también sentir miedo como podría sentirlo si se encontrara con un tigre en el medio de la selva. Luego del recorrido, disponemos de un espacio con sombra, mesas, sillas y juegos, por si desean quedarse un rato más”, dijo Arias.