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Atletas uruguayos son recibidos como héroes

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El equipo de fútbol femenino incluye en el equipo a personas que padecen discapacidad intelectual y otras que no. Foto: El País

SOCIEDAD

El equipo ganó 43 medallas en las Olimpíadas Especiales.

Los 41 adolescentes y jóvenes que participaron en las Olimpíadas Especiales en Emiratos Árabes fueron recibidos como héroes en sus respectivos departamentos. Niños de escuelas, profesores y vecinos salieron a las calles para darle la bienvenida a los recién llegados, que ganaron en total 43 medallas en 8 disciplinas en la competición internacional que se llevó a cabo desde el 11 hasta el 22 de marzo. Hubo representantes de Rivera, Tacuarembó, Durazno, Florida, Lavalleja, San José, Montevideo, Maldonado y Canelones. Y compitieron en atletismo, triatlón, natación, aguas abiertas, gimnasia artística, equitación, voleibol playa y fútbol femenino.

Dan tiene 28 años y es uno de los chicos que participó en las Olimpíadas Especiales. Aunque practica natación desde hace más de 15 años, ésta fue la primera vez que estuvo en la competición llevada a cabo en Abu Dhabi. Y el resultado no pudo ser mejor: en las tres carreras que nadó obtuvo medallas; una de oro y dos de bronce. Según cuenta Silvia Brauner, madre de Dan, su hijo está feliz por lo que consiguió. “Son logros muy importantes para estos chicos”, dice emocionada.

Con “estos chicos” se refiere a adolescentes y jóvenes con discapacidades intelectuales, que son los únicos que pueden competir en las Olimpíadas Especiales. “Este tipo de eventos les hace muy bien porque les levanta el autoestima, les da seguridad, y les muestra que ellos pueden, que no hay que tener todo para tener éxito”, indicó la madre.

Según contó Silvia, al regresar el país hace pocos días le hicieron una pequeña fiesta e invitaron a amigos. “Estaba feliz. Esta vez él era el principal y no siempre tienen oportunidades de ser los protagonistas”, dijo.

En Saman, el lugar donde Dan está trabajando desde hace tan solo tres meses, lo dejaron viajar sin problemas durante las dos semanas que duró el evento y además lo recibieron con pancartas en la oficina. “Vino muy contento. De algún modo esa experiencia le cambió su vida”, asegura su madre.

Los uruguayos obtuvieron 17 medallas de oro, 14 de plata y 12 de bronce. Foto: El País
Los uruguayos obtuvieron 17 medallas de oro, 14 de plata y 12 de bronce. Foto: El País

En eso coincide Aurora Saroba -directora de las Olimpíadas Especiales de Uruguay, una organización sin fines de lucro que llegó al país hace unos 35 años- al asegurar que “unos chicos son los que van y otros los que vuelven”.

“Ellos se dan cuenta que pueden dar algo más, los fortalecen emocionalmente y les da independencia y autoestima”, dice.

Independencia

Durante el evento se alojan en hoteles donde conviven con delegaciones de distintas partes del mundo, “que aunque a veces no hablan el mismo idioma, tienen la posibilidad de interactuar con otros, lo que es algo muy positivo”, dice Saroba.

Según cuenta, la organización ha estudiado “absolutamente todo, para que los chicos pasen de la mejor manera posible y cuando vuelvan a sus localidades se sientan un poco más autónomos. La experiencia los hace evolucionar de una forma sumamente positiva”, indicó, y dijo que para ellos “es lo máximo ir a un evento de este tipo”.

La organización de Olimpíadas Especiales Uruguay busca que vayan a la competencia “lo más preparados posibles”.

“Son muy responsables y se sienten muy exitosos tras los logros, al igual que la familia y la comunidad. Me han llegado fotos y vídeos de Maldonado, San José y también de Florida, donde los han recibido con caravanas. Ellos pasan a ser héroes dentro de su mundo, la emoción que tienen por eso es extraordinaria y se mostraron muy agradecidos. ‘Gracias por haberme dejado vivir esta experiencia’, decían. Esto indudablemente marca un antes y un después de haber concurrido a los juegos”, dijo Saroba.

Distintos niveles para que sea “más justo”

Los atletas de las Olimpíadas Especiales pueden competir en 32 deportes de verano o invierno de estilo olímpico. Las competiciones están adaptadas para permitir varios niveles de discapacidad, de forma que los atletas puedan participar con otros que tengan similares niveles, lo que hace que cada competencia sea justa y desafiante para los atletas.

Más de 4,5 millones de atletas de todos los países y edades están involucrados en los programas deportivos de las Olimpíadas Especiales. La organización ofrece entrenamiento durante todo el año y se hace cargo de todos los gastos, como alojamiento y comida de miles de atletas, durante las dos semanas que dura el evento.

Los uruguayos obtuvieron 17 medallas de oro, 14 de plata y 12 de bronce. Foto: El País
Los uruguayos obtuvieron 17 medallas de oro, 14 de plata y 12 de bronce. Foto: El País

El deporte como medio para el desarrollo

Olimpíadas Especiales surge en 1962 por iniciativa de Eunice Kennedy, hermana del expresidente de EE.UU, John Kennedy, quienes tenían una hermana con discapacidad intelectual. En ese entonces, pensaron qué podían hacer por ella y surgió la idea de utilizar el deporte como medio para que pudiera evolucionar. Para Aurora Saroba “la gran virtud de esta organización fue mostrarle al mundo que por medio del deporte una persona con discapacidad intelectual puede lograr lo que se plantee”. Llegó a Uruguay en 1983 de la mano de la maestra y psicóloga Eloisa García de Lorenzo, quien también llevó la organización a varios países de Latinoamérica. Desde que llegó al país, la celeste ha participado de todas las ediciones.

DIFICULTADES

El desafío de conseguir financiación para viajar

La organización sin fines de lucro Olimpiadas Especiales está dedicada a las personas con discapacidad intelectual. El evento se realiza cada 2 años, alternando entre juegos de invierno y juegos de verano. En esta oportunidad fueron los juegos de verano en donde participaron 192 países, con 7.200 atletas. Según explicó a El País la directora de la organización en Uruguay, Aurora Saroba, las normas de los deportes son exactamente iguales a las del Comité Olímpico, pero no pertenecen a la organización sino a otra distinta que tiene sede en Washington (EE.UU.). Profesores de Educación Física voluntarios, distribuidos por todo el país, son quienes se encargan de entrenar en los distintos deportes a los adolescentes y jóvenes. El desafío más grande que en cada evento tiene Uruguay es pagar los pasajes, que en esta oportunidad eran especialmente costosos. “Fue un desafío, porque era una delegación muy grande, de las más numerosas de Latinoamérica, pero por suerte se logró llegar a la meta”, dijo Saroba. Para ello fue fundamental el apoyo de las empresas, de la Secretaría de Deportes y de las distintas intendencias que en algunos casos costearon el total del viaje de sus deportistas.

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