El conductor se confesó en una entrevista en Verano caliente y dijo que tantas horas en la pantalla hicieron que en la vida cotidiana sea una persona más apagada que antes.

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Rafa Villanueva atraviesa uno de los años más intensos de su carrera: con dos programas al aire en Teledoce (Súbete a mi moto y Me resbala), Radiomental en Azul FM y debutó en teatro con el monólogo Viaje al interior de Rafa. 

El comunicador confesó al programa Verano caliente, de Canal 7 de Punta del Este, que disfruta de su presente, aunque siente algunas señales de cansancio y que el trabajo le ha sacado algunas reservas de su costado divertido. "En la vida, soy muy parecido a lo que se en TV, no vendo algo que no soy. Pero lo que me pasó en los últimos tiempos es que la la TV absorbió mi lado divertido. En la vida cotidiana estoy más apagado que antes porque no se puede estar todo el tiempo para arriba", dijo.

Rafa también aseguró que toma su rol en los medios como un trabajo. "Es imposible encantarle a todo el mundo. No hay talento capaz de hacerlo. Cuando recién empezaba me dijeron una vez: para gente sos un tonto o sos un genio. O te compra 100% o te rechaza. Pero vos tenés que tener claro que no sos ni un tonto, ni un genio. Para mí es un trabajo". 

Rafa también habló de sus comienzos en el equipo de periodistas deportivos del prof. Ricardo Piñeyrúa, en el año 1998. Dijo que tenía el sueño de ser jugador de fútbol y que también pensó en la carrera de arquitectura. 

"Me hubiera gustado ser arquitecto, pero era muy cara la carrera y no podía costear. A los 17 años me fui de mi casa y lo más importante para mí era mantener el trabajo para sustentarme. También quise ser psicólogo en algún momento y creo que lo hubiera disfrutado mucho". 

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