A medida que visita programas, se acrecienta su popularidad.

Pocas primeras damas han tenido tanta exposición mediática como la actual, Michelle Obama, y ella ha aprendido a sacarle el jugo a esta situación.

Recordadas son sus apariciones en distintos programas de televisión (ha visitado todos los importantes), desde Oprah, pasando por Ellen y los late show: el de Jimmy Fallon, Stephen Colbert y Jon Stewart, siempre derrochando simpatía y sin miedo a caer en el ridículo (así ha bailado y cantado en televisión), siempre con su carisma intacto. Un carisma que las rígidas normas de seguridad del famoso servicio secreto no han logrado aplacar.

Este año, sin ir más lejos, apareció en distintos programas de televisión, como el reality musical The Voice, donde acudió junto a la esposa del vicepresidente Joe Biden, Jill Biden, por el quinto aniversario de Joining Forces, una iniciativa creada por ella y el vicepresidente Joe Biden, que busca ayudar a miembros del Ejército, a veteranos y a sus familias a encontrar empleo, educación y recursos para una vida mejor.

Según comentó la revista Variety, la primera dama también tuvo una breve participación en la serie policial NCIS, logrando un hecho único en la televisión, ya que fue la primera vez que a un programa que no fuera de noticias, se le permitió filmar dentro de la Casa Blanca.

Pero el miércoles pasado se subió a la camioneta más famosa, la que conduce James Corden, para el Carpool Karaoke. Si bien el segmento de Corden transcurre mientras el conductor pasea al invitado por la ciudad, para el caso de la primera dama, no pudieron salir de los límites de la Casa Blanca. Pero igual Michelle cantó alguna canción de Stevie Wonder y movió sus manos al son del hit “Single Ladies” de Beyoncé. Si algo hay que reconocerle a esta primera dama es el buen uso que le da a los medios. Con el Carpool Karaoke, por ejemplo, presentó, con la rapera Missy Elliot sentada en el asiento trasero, la canción de Diane Warren “This is For My Girls”. Un himno escrito a entero beneficio de Let Girls Learn, una iniciativa del Gobierno estadounidense que busca que las niñas del mundo puedan estudiar.

En cada entrevista, Michelle Obama permite ver un poco cómo es el detrás de escena de la familia presidencial. Así le contó a la conductora Rachel Ray que el servicio secreto le enseñó a manejar a su hija Malia. Mientras que a James Corden le confesó que hace siete años que no ocupa el asiento del copiloto por las medidas de seguridad. Así, en medio del paseo en auto por los jardines de la Casa Blanca, Corden le pregunta si el presidente Obama está en la Oficina Oval, a lo que Michelle responde: “más le vale, dijo que allí estaría”. Y es por estos comentarios desenfadados, que Michelle Obama no es otra primera dama más.

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