COLUMNA FARANDULERA

fabiola bouvier

Con dos egos tan enormes que a duras penas logran entrar juntos en el estudio del Cantando 2020, Karina “La princesita” y Esmeralda Mitre continúan sacándose chispas cada vez que tienen que enfrentarse, una como jurado y la otra como participante. Esos roces se deben a que una quiere hacerse notar todo el tiempo, la otra porque no le gusta que critiquen el puntaje que otorga.

Si bien Esmeralda Mitre se convirtió en una de las participantes más divertidas y también la favorita de Marcelo Tineli, cada presentación suya deja que desear. Igualmente la semana pasada dejó todo en la pista, aunque al jurado no terminó de convencer. Al menos, no a la Princesita.

Además, a la jurado le fastidia que, según ella, la participante no se tome a bien las devoluciones.

Según me contó mi amiga Irene, la jurado defendió el “1” que le puso a la heredera, y remarcó que no se siente a gusto con las performances de la artista. También adelantó que, pese a sus enojos y “berrinches”, ella seguirá manteniéndose fiel a si misma poniendo la nota que quiera.

“Es un show, para ella es un show y para mí también”, dijo la Princesita que ya se dio cuenta que todo es para las cámaras, incluso la pelea con Mitre.

Al final Mitre no tuvo que enfrentarse al voto telefónico (donde viene imbatible) ya que el puntaje de Oscar Mediavilla la salvó de esa instancia. Los que respiraron fueron los sentenciados que no tuvieron que enfrentarse a Mitre en el voto del público.