Descargo

"Hay periodistas serios, hay chantas que dicen ser periodistas y hay operadores políticos en los medios de comunicación". Con esa afirmación, sin filtro, Christian Mirza empezó su descargo en su cuenta de Facebook, a propósito del informe realizado por Alejandro Amaral que se emitió el último domingo en Santo y Seña.

El exfucionario del Mides y tertuliano de En perspectiva agregó que Álvarez y su equipo periodístico se encargaron de "denostar" al ministerio de Desarrollo Social y que se les "olvidó" informar con "cifras fidedignas sobre los servicios, los contenidos de los convenios, la población destinataria, la metodología aplicada, el número y perfil de los profesionales asignados y un largo etcétera".

Mirza se mostró particularmente molesto con los periodistas por haber manifestado "dudas o sospechas" acerca de lo que implicaba su vinculo como exdirector del CPP (Centro de Participación Popular) con el Mides.

Al respecto hizo las siguientes aclaraciones:  

"1) que fui orgullosamente uno de los fundadores del CPP en 1986 y su primer Director Ejecutivo (1986-1995).

2) que en 1995 renuncié a toda función remunerada en el CPP, en razón de la incompatibilidad por desempeñarme como asesor del Intendente Arana (1995-2004)

3) que al término de mi labor en 2004 renuncié al cargo en la IMM para asumir como Director Nacional de Políticas del MIDES (del cual me siento "cofundador") en el año 2005 y hasta el fin del período en el año 2010.

4) que después de mi renuncia en 1995 nunca más asumí cargo remunerado en el CPP, ni tampoco fui Directivo, es decir no trabajé y no ejercí cargos honorarios después de esa fecha y hasta el día de hoy.

5) que siempre actué con rigor, objetividad y compromiso social en el desempeño de mi cargo político como Director Nacional de Políticas Sociales, respetando - y era un criterio generalizado en el MIDES - la aplicación del TOCAF (conjunto de normas que regulan los llamados públicos y contrataciones del Estado)

6) que lo expresado en el programa de referencia constituye una práctica (reiterada) que intenta perjudicar - sin fundamento alguno - a quienes desarrollamos una tarea política y profesional en el MIDES.

7) que fabrican sus supuestas "verdades" de manera malintencionada e inescrupulosa, manipulando los dichos y los hechos con la única finalidad de sembrar una imagen falsa y distorsionada.

8) que con dicha práctica mediática jamás podrán borrar ni oscurecer todos los logros del MIDES (mal que les pese) como parte de las políticas sociales progresistas".