ENTREVISTA

Desde el living de la casa de Eduardo Larbanois se escucha, lejana, una interpretación de “Ky Chororó” a cargo de la dulce voz de Melaní Luraschi y los delicados arpegios de la guitarra de Larbanois. A cada paso, la música crece. En el pasillo que da a una escalera caracol reposa un pequeño parlante Bluetooth y, por un momento, me convenzo de que se está reproduciendo la grabación que abre Elogiando el viento, el EP de tres canciones que el dúo publicó en abril. Cuando subo esa escalera caracol confirmo que estoy equivocado.

Sentados sobre un escalón de la amplia habitación, Larbanois y Luraschi interpretan el clásico de Aníbal Sampayo mientras el fotógrafo Leonardo Mainé captura el momento (ver foto principal) con su cámara. Con un cuatro venezolano bajo el brazo, Luraschi toma la voz principal mientras Larbanois completa la hermosa canción con los arpegios de su guitarra, y se encarga de la segunda voz. Cuando armonizan, logran transmitir una cálida sensación de intimidad.

Los separan varias décadas, pero la conexión musical entre las distintas generaciones fluye naturalmente. Minutos más tarde, Larbanois lo confirma. “Cuando estábamos haciendo la canción (“Ky Chororó”), escuchaba los matices y sentía cómo los estábamos pegando juntos sin avisarnos. Es natural, aunque es una cosa que lleva mucho tiempo. ¿Te diste cuenta?”, le pregunta a Luraschi, quien asiente con una sonrisa.

“Es muy gratificante trabajar con gente joven, porque te hace ver las cosas de otra manera”, dice el guitarrista, quien hace más de 40 años forma parte del dúo Larbanois & Carrero. “Es la forma de seguir creciendo en el oficio que uno ama y en el que siempre estás aprendiendo”.

“Para mí es maravilloso porque toda la vida me gustó compartir con otras generaciones”, define Luraschi. “Eduardo es un maestro de toda la vida y nos estamos complementando en un montón de cosas”.

El dúo se presentará mañana a las 21.00 en la Sala Zitarrosa (entradas en Tickantel) con el espectáculo Elogiando el viento. Este recital será su debut en un escenario montevideano, pero el proyecto ya tiene dos años.

El dúo nació mientras Luraschi —cuyos discos Canto ancestral y el interesantísimo Lumbral están disponibles en Spotify— estaba tomando clases con el guitarrista. En uno de los encuentros, ella interpretó “Soledad y el Mar” luego de que su profesor le pidiera una canción. “Cuando canté, me dijo que quería hacer algo conmigo”, relata. “Pensé que era raro porque pila de veces me ha pasado de que gente me ha dicho de hacer algo, pero queda ahí”.

Un tiempo después, Larbanois le comentó que había conseguido un lugar para presentarse y confirmaron el proyecto. Empezaron a ensayar y a seleccionar el repertorio. “Fueron horas y horas de mostrarnos canciones”, dice Luraschi.

En este tiempo, letras de Violeta Parra, Víctor Jara, Caetano Veloso, Chabuca Granda, Gustavo “Cuchi” Leguizamón, Aníbal Sampayo y Washington Benavides se sumaron a su repertorio. Luego, en abril de este año, lanzaron Elogiando el viento, un EP con versiones de “Ky Chororó”, “La nochera” y “Yo no soy de por aquí”, que presenta una primera mirada a su interesante trabajo en conjunto.

"Estamos en un momento muy cambiante, pero está bueno mantener el respeto a la gente de otras generaciones", explica Luraschi sobre su interés por rescatar el repertorio de artistas esenciales de la música popular latinoamericana. "Siempre creí que, por más de que esta modernidad es mucho más rápida, no podemos descartar todo lo anterior". 

"Me pasó de sorprenderme con el desconocimiento que existe en mi generación con respecto a ciertos compositores populares y latinoamericanos que vienen haciendo un recorrido de hace mil años", asegura. "A veces decís 'folclore' y uno puede pensar que es un embole y generar un preconcepto,  pero es una música tiene una gran riqueza armónica, melódica y poética. Realmente es un trabajo fino y de mucha calidad. Con Eduardo hemos agarrado cada tema y le ponemos nuestra impronta. Queremos acercarlo a un nuevo público", agrega la artista, quien recientemente publicó "Orión", una canción grabada junto al argentino Lisandro Aristimuño.

En su show de la Sala Zitarrosa, Larbanois y Luraschi presentarán versiones de los artistas anteriormente nombrados, incluirán composiciones propias y recitarán textos. “Nos gusta cuando las personas se abren a escuchar, se dejan llevar y viajan con nosotros por donde los vamos a llevar”, propone la cantante. "También me gustaría que vaya gente joven porque me encantaría que conozcan y profundicen en este repertorio, que tiene letras y compositores increíbles".