En 2005, cuando el rock nacional vivía uno de sus mejores momentos impulsado por la masividad del Pilsen Rock, una banda emergente hizo que todos en la escena local se detuvieran a prestarle atención.

Doberman publicó de manera independiente Doberman, un disco de rock duro con un sonido demasiado emparentado a AC/DC. Al frente estaba Nacho Obes, uno de los cantantes más destacados del medio, quien también le puso la voz a los siguientes dos álbumes: El último en pie (2007) y Tren calavera (2011).

Cuando a mediados de 2013 Obes les informó a sus compañeros que quería emprender otro camino (presentó renuncia, según publicó en Facebook), ninguno se planteó dejar de tocar. "Jamás", enfatiza en conversación con El País el guitarrista Andrés Mozzo, sentado en la mitad de una Trastienda desierta que mañana estará ocupada por un público ansioso por escuchar en vivo Insoportable, su flamante trabajo.

En el poco tiempo que tuvieron para preocuparse por quién ocuparía su lugar, el exbajista Federico Delfino sugirió el nombre de Alejandro Llambías, con quien ya habían compartido escenario antes y que había tenido un inusual periplo por Suiza, adonde llegó como candidato para sustituir al fallecido Steve Lee —"uno de los mejores cantantes de rock de la historia", dice el vocalista— en el popular grupo Gotthard.

A Llambo, como le dicen sus amigos, lo llamaron de inmediato, le hicieron una propuesta formal que aceptó, empezaron a ensayar y a componer, grabaron un disco y lo lanzaron: "fue todo muy rápido". Mozzo asegura que desde el principio hubo "mucha afinidad" tanto con él como con Fernando López, "el Rengo", quien también llegó desde la disuelta Muromets para sustituir a Delfino, que viajó a Estados Unidos pero estuvo directamente involucrado en la gestación del cuarto álbum de la banda. Se adaptaron a las maneras que tenía cada uno de llevar adelante el proceso compositivo y todo anduvo "sobre rieles".

Insoportable es el producto de ese extraño e intenso año de trabajo, que tendrá su estreno en vivo mañana a partir de las 21:30 en La Trastienda. Lo bautizaron así porque "la crítica y autocrítica" y "el palo" atraviesan las 12 canciones: "Hay temas que hablan de la observación de cómo está la sociedad, de cómo nos comportamos las personas. Hay gente a la que le parece que el mundo está bien y le va a resbalar todo lo que digas, y otra que de repente se puede estar cuestionando y le movés alguna piecita", explica Llambías sobre las letras.

Además, para Germán Seoane, guitarrista y fundador de Doberman, es de destacar el hecho de que ya pasaron los 30 años y no están para cantar sobre "te amo y esas pelotudeces". "Se comen lo del amor, lo de si te vas me muero, y hay veces que todas esas cosas desencadenan en violencia doméstica. No estoy de acuerdo en venderles a los chiquilines el tema del amor, que se lo encajan por la cabeza". El fin de la banda es "hacer rock duro que te haga agitar, mover la pata".

Doberman decidió que Insoportable esté disponible para descargar gratuita y libremente por Internet "para llegar a la mayor cantidad de gente", y porque si los propios integrantes no tienen dónde reproducir un CD en su casa, entienden que es un mal de muchos. El resultado de esta determinación fue "muy exitoso, dentro de nuestros parámetros": en la primera semana contabilizaron más de 2.300 descargas.

Insoportable será presentado mañana a las 21:30 en La Trastienda, en un show del que participarán como invitados Bruno Andreu, guitarrista de Once Tiros; Frank Lampariello, ex Hereford y actual Hermanos Brother; Coné Vecino, ex Vinilo y actual Amigos inflables; y Christian Cary, frontman de La Triple Nelson. "Vamos a hacer el disco nuevo y los grandes éxitos, y capaz alguna sorpresita más", prometen.

Más allá de los cambios en la integración, Doberman mantuvo la esencia hard rock que la caracteriza en Insoportable, un disco al que consideran "lleno de rock" y que salió al mercado a fines de 2014 con 12 canciones inéditas. Los guitarristas Andrés Mozzo y Germán Seoane, dos de los miembros originales del grupo, se mantienen en sus puestos y permiten que una de las claves del sonido Doberman, que tiene que ver con la ejecución de las guitarras, se mantenga intacta. Además de ellos dos, el baterista Matías Kramer continúa en su puesto y comparte escenario con los últimos que se sumaron, el bajista Fernando López y el cantante Alejandro Llambías. De Insoportable también participó el exbajista Federico Delfino, quien además de ser el responsable de la llegada de Llambo, aportó "toda su experiencia y talento" involucrándose con la composición de buena parte de los temas. Las letras, por su parte, estuvieron a cargo de Mozzo, el tradicional compositor de Doberman, y de Llambías.

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