Libros en la redacción
Ramiro Sanchiz construye una historia personal de "Guitarra negra" y la escritora chilena comparte el duelo por la muerte de su hermana
Alfredo Zitarrosa, un misterio y una historia
Segunda participación de Ramiro Sanchiz en la colección “Discos” que, bajo supervisión de Gustavo Verdesio, viene editando Estuario. El otro libro de Sanchiz fue Caída libre de La Trampa pero acá va por otro lado: es un repaso personal, no necesariamente biográfico o musical de Guitarra negra, el disco de 1977 de Alfredo Zitarrosa. En algún sentido, funciona como una novela (en la misma colección, Gabriel Peveroni hizo lo mismo con Tango que me hiciste mal y Carolina Bello con Oktubre) donde importa tanto el relato como cómo éste se mezcla con una reflexión sobre el disco de “spoken word” de Zitarrosa. Hay una historia que siempre termina en la música, hay un misterio que quizás esté revelado en esas estrofas.
Una novela sobre la pérdida y el duelo
Uno de las grandes autoras de aquella ola femenina latinoamericana de la década de 1990 (a la que aportó un par de sus clásicos, Nosotras que nos queremos tanto en 1991 y Antigua vida mía en 1995), Marcela Serranono ha parado de publicar y de consolidarse como uno de los grandes nombres de la literatura contemporánea. El disparador de El manto, su nueva novela (y quizás la más personal de su carrera) es la muerte de su hermana Margarita en noviembre de 2017. El libro -a medio camino entre novela y diario- reúne los apuntes con los que Serrano acompañó ese duelo de un año. El tono es, obviamente, sentido pero no necesariamente lúgubre: nunca el amor puede ser triste del todo.