Publicidad

El final de una serie que hizo reír a pesar de sus problemas

Compartir esta noticia
two and a half men

No se llega a 12 temporadas así nomás. La mayoría de las sitcoms (así se llaman estas comedias de media hora) rondan algo más de un lustro, y con suerte luego hay una película. Hay excepciones como Los Simpson, pero son eso, excepciones.

La serie que termina hoy en Estados Unidos luego de 262 capítulos (la emisión del último en América Latina es el 4 de marzo por la señal Warner) tuvo varias etapas: los primeros pasos, cuando aún no se habían asentado los personajes y sus características, la "época dorada", cuando conectó con la audiencia, y el declive, cuando salió Charlie Sheen y entró Ashton Kutcher.

No se sabe demasiado de lo que será el capítulo que le pondrá broche final a la serie, pero sí se sabe que será un episodio especial dividido en dos partes y que se llamará Of course hes dead ("Por supuesto que está muerto"), lo que disparó los rumores que Sheen estará presente en el final. Ni siquiera Jon Cryer, el único que estuvo de principio a fin, sabe si Sheen estará. O al menos es lo que él dice: "No sé si va a estar o no en el último episodio. No me lo dejaron leer entero y sé que estuvieron grabando sin mí", le dijo el actor a Clarín.

Si Sheen vuelve, sería el regreso del personaje que se ganó a la audiencia con su desparpajo y bonhomía, siempre persiguiendo mujeres y diversión, todo lo opuesto a su hermano, el mucho más acartonado Alan, interpretado por Cryer. En el medio, el hijo de Alan (interpretado por Angus T. Jones) como balanza entre los dos polos.

Fueron las andanzas del personaje de Sheen, y el contraste con su hermano, que fundamentaron el éxito de la serie. Eso, y las poco disimuladas similitudes entre los rasgos del personaje de Sheen y la vida más o menos real del actor, que parece llamar a los problemas.

Sin embargo, lo que más se recordará de la serie no será tanto el nivel de sus guiones, la colaboración y entendimiento entre sus protagonistas o el enorme éxito que en algún momento determinó que Sheen cobrara la inusitada cifra de dos millones de dólares por capítulo.

Lo que para muchos será memorable de la serie es el gigantesco descalabro de Sheen tras ocho años de éxito contínuo. Un día —al parecer de la noche a la mañana— empezaron a aparecer noticias sobre las andanzas y los problemas de Sheen: apariciones bizarras del actor en YouTube o en noticieros, datos sobre su consumo de cocaína y alcohol y el aparentemente interminable desfile de chicas lindas —modelos, actrices, prostitutas, actrices porno, strippers— con las cuales Sheen se enfiestaba un día sí y otro también.

Esos excesos y un estado de ánimo volátil —dicen que Sheen se irrita fácilmente— determinaron que tras ocho temporadas de ratings envidiables, los dueños de la serie despidieran a la estrella principal.

Sheen respondió a través de Twitter y apariciones públicas, Sheen despotricaba e insultaba a diestra y siniestra, pero había un destinatario en particular para su bilis: Chuck Lorre, el creador de la serie.

Tanto uno como el otro se movían con naturalidad en el showbusiness: Sheen como hijo de Martin Sheen (y hermano de Emilio Estevez) y Lorre como un emprendedor guionista y creador de series televisivas, con muchos años de experiencias en comedias como Rosanne, y un período de músico que incluyó un éxito menor para el grupo Blondie, French kissing in the USA. Lo que comenzó como una relación mutuamente ventajosa fue dando lugar a una tensión entre creador y estrella que desembocó en los consabidos escándalos.

Sheen, en tanto, no se arrepiente de nada: "Nunca estrellé mi auto contra un inocente. Nunca disparé mi arma en un shopping lleno de gente. No me arrestaron con una pistola y heroína. No subí un arma de fuego a un avión. Nadie me mandaba menores de edad a mi rancho. Seguro, cometí un montón de excesos. Pero si se presta atención al corazón de lo que hice (...) ¿quién no lo hubiera hecho?", dijo en alguna entrevista que reprodujo hace algunos años el diario argentino Página 12.

El eterno femenino de una imaginativa pintora
two and a half men

Hoy se emite en Estados Unidos el último capítulo de Two and a half men

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

cineCharlie SheenWARNER

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad