Unos 200 proyectos buscan venderse al mundo y hay funciones gratis en seis ciudades.

Ocho años atrás, Luis González Zaffaroni lanzó un evento con el objetivo de reunir a documentalistas y televisoras en un mismo espacio durante 10 días. Quería presentarlos como actores capaces de entenderse y trabajar juntos, rompiendo así con la imagen de antagonismo que los envolvía. DocMontevideo se enfocó en el documental "de creación" (es decir, ese que es más novedoso y no se restringe a mostrar "cabezas parlantes"), ofreciendo a los cineastas talleres de escritura y reuniones con potenciales compradores. Ese primer año circularon 30 proyectos. Ahora son más de 200.

La estructura del encuentro creció a tal punto, que sus actividades recorren cada una de las etapas de realización de un documental: escritura, presentación, búsqueda de socios, venta, exhibición e, incluso, se realizan "estudios de caso" de los proyectos más exitosos.

Aunque arrancó siendo de interés para televisoras públicas (que suelen ser las que más consumen este tipo de contenido), en cada edición aumenta la presencia de canales privados que se acercan en busca de proyectos para llenar su grilla, pero que también se asocian con otros canales interesados en coproducir. De esta forma se lograron alianzas insólitas como la que generó la serie Los colores del fútbol, que reunió a socios latinoamericanos, europeos y asiáticos. Con un modelo similar se está preparando Big Cities.

"Hay una demanda grande en el entorno para este tipo de encuentros, sobre todo porque el documental se posicionó fuertemente en el cine del mundo. Está pasando algo y nosotros no nos lo queremos perder", dice González. De forma estratégica, DocMontevideo se convirtió en la sede de la red de televisoras públicas de América Latina (TAL), que incluso aprovecha el evento para premiar a las mejores producciones del año.

La fama mundial del evento atrajo a ejecutivos de los festivales de cine documental más importantes. Como muestra, en esta edición estarán presentes representantes de IDFA (Holanda), Dok Leipzig (Alemania) y Sheffield Doc Fest (Reino Unido). También se acercan figuras de "laboratorios" y "clínicas" que trabajan con los cineastas durante el proceso de realización, y de los principales mercados de comercialización de documentales que llegan a Montevideo para reclutar proyectos interesantes.

En Uruguay el cine documental representa un poco más del cincuenta por ciento de los estrenos nacionales. Estas obras recorren festivales con tanto éxito como las ficciones. "Creo que DocMontevideo promovió la reflexión sobre el hacer. Acerca de cómo un documental es una construcción narrativa compleja, que requiere de compromiso, de dominio del lenguaje, pero también del relacionamiento con el otro", opina.

Entre los largos locales más beneficiados por esta instancia están Avant (Juan Álvarez Neme) y El Bella Vista (Alicia Cano). El documental acerca de la gestión de Julio Bocca en el Ballet del Sodre consiguió un socio que aportó 107.000 dólares, mientras que la ópera prima de Alicia Cano logró 40.000. "Más allá de las cifras, lo importante es que se conocen productores, programadores y seleccionadores que hacen que las cosas buenas que podrían pasarle a tu proyecto sucedan. Le dan visibilidad, porque lo invitan a otros talleres en otros países, lo ayudan a conseguir más socios en work in progress, y luego lo conectan con festivales", agrega González.

En los últimos años varios canales de televisión y plataformas como Netflix notaron un interés del público por este género. Eso los motivó a incrementar la franja destinada a este tipo de producto. Por eso, la novedad de este año en DocMontevideo es la presencia de tres canales brasileños y de Globo News, el canal que emite noticias durante 24 horas y que decidió comprar 50 documentales para emitir en 2017.

La fuerza del documental se mide también en los eventos competitivos. El Festival de Cine de Berlín decidió mezclar este género junto con ficción en la misma competencia. El año pasado el Oso de Plata al Mejor Guión se lo quedó el documentalista chileno Patricio Guzmán por El botón de nácar. Guzmán ya había triunfado en Berlín en 2010 con otro documental, Nostalgia de la luz, que se alzó como la Mejor Película.

El Festival de Cannes no se quedó atrás. En 2015 lanzó el premio El ojo de oro al Mejor Documental. Ese año lo ganó Allende, mi abuelo Allende (Marcia Tambutti ), y éste Cinema Novo (Eryk Rocha). Ambos proyectos dieron sus primeros pasos en DocMontevideo.

Entre las principales virtudes del evento están la calidad sobresaliente de las personalidades que dictan clases maestras, y la programación que se exhibe en La semana del documental, que suele incluir algunas de sus obras.

Así fue que el brasileño João Moreira Salles trajo Santiago, que el chileno Ignacio Agüero presentó Aquí se construye, y que el montajista danés Nils Pagh Andersen exhibió The act of killing. Esta edición recibe al argentino Andrés Di Tella con 327 cuadernos, y al estadounidense Alan Berliner con Primo lejano. Son dos brillantes films acerca de la memoria.

"Nuestro principal desafío es lograr continuidad porque todos los logros se basan en afianzar una red de contactos que tiene que ver con estar presentes", dice González. "Sabemos lo importante que es para un documentalista usar a DocMontevideo como un trampolín para llegar a un mercado donde puede ocurrirle cosas maravillosas. Algo parecido a lo que le sucedió al equipo de 25 Watts cuando fue a Rotterdam y se les abrió un mundo nuevo".

La semana del documental tendrá funciones gratuitas del 23 al 27 en Montevideo, Salto, Maldonado, Canelones, Colonia y Artigas. La grilla está en la web del evento. Se proyectará 35 y soltera (Argentina, Paula Schargorodsky), testimonio hilarante acerca de la soltería. Jonas y el circo sin carpa (Brasil, Paula Gomes), conmovedor retrato de un niño que sueña con volver a sus raíces familiares y vivir en un circo. Nueva Venecia (Uruguay, Emiliano Mazza), acerca de un pueblo que vive sobre el agua pero ama el fútbol. Eryk Rocha, hijo del mítico Glauber Rocha, presentará su premiada Cinema Novo. Sobre la memoria se exhibirán dos obras estupendas: 327 cuadernos (Andrés Di Tella) y Primo lejano (Alan Berliner). Oleg y las raras artes (Andrés Duque) acompaña a un pianista ruso de 90 años, y Los de siempre (José Pedro Charlo) a un grupo de jubilados devenidos en coristas.

José Pedro Charlo acompaña y entrevista a grupo de jubilados integrantes de un coro amateur que se reúne en una policlínica del Marconi. Estos vecinos planean shows y excursiones a la vez que opinan sobre el barrio.

Paula Gomes y su cámara conviven con Jonas, un talentoso niño que sueña con vivir en un circo como el que tiene su tío, pero su madre (que creció en ese ambiente) quiere que estudie primero.

Paula Schargorodsky se convirtió en protagonista de su primer largo como directora. Revisa las 578 horas de filmaciones de sus ex, pero también los visita para entender qué no funcionó y por qué sigue soltera.

DOCMONTEVIDEO