Publicidad

El sueco que pintó su aldea y además inventó un género

Compartir esta noticia
Murió el maestro de la novela policial, creó la zaga del Inspector Wallander.
FILES - Picture taken on June 3, 2010, shows Swedish author Henning Mankell during a press conference about his experience of the Israeli attack on a Gaza-bound aid flotilla in Berlin. Swedish crime writer Henning Mankell died at the age of 67, as announced on October 5, 2015. AFP PHOTO / JOHANNES EISELE GERMANY-SWEDEN-LITERATURE-MANKELL-OBIT-FILES GERMANY-SWEDEN-LITERATURE-MANKELL-OBIT-FILES
JOHANNES EISELE/AFP

Ahora hay cientos de escritores policiales, pero de los últimos, él es el mejor", le dice a El País, el crítico y escritor Elvio E. Gandolfo. Es para creerle, desde siempre ha sido un promotor honorario de la literatura de Henning Mankell, el escritor sueco que falleció en la madrugada de ayer.

Esa opinión es compartida por una importante cantidad de seguidores de sus libros en Uruguay: casi todas las bibliotecas domésticas, grandes o modestas, tienen algún libro de la saga del inspector Wallander, su creación más popular.

Mankell, considerado uno de los grandes maestros de la novela policíal y uno de los escritores más leídos y celebrados del mundo, murió en Goteborg a los 67 años; padecía cáncer desde hace años. Su convivencia con la enfermedad está presente en Arenas movedizas (editado en Uruguay por Tusquets), que reúne las columnas para diarios europeos en los que contó el proceso de su enfermedad.

"Mankell tenía algo que también tenían Sir Arthur Conan Doyle con su Sherlock Holmes y Maurice Leblanc con Arsenio Lupin: los tres detestaban al personaje porque es lo que tenía éxito", dice Gandolfo. "Y además es lo mejor que hicieron"

Con los casos del inspector Wallander —que relató en libros todos ellos publicados en Uruguay por Tusquets, su editorial en español—, la novela negra dio un salto enorme, tanto en temas como en lectores. Mankell, escribió Guillermo Altares en El País de España, "fue no sólo un gran autor de libros policiacos, sino que, a través de sus relatos, trazó un retrato crítico de la sociedad europea contemporánea". Sus libros trasncurrían en un trasfondo social (la integración de los inmigrantes, la violencia de género) que revelaban en lado menos confortable del estado de bienestar en el que vivía Mankell, quien junto con Abba e Ingmar Bergman (que además era suegro de Mankell) es de los grandes ingresos suecos a la cultura popular global del último medio siglo.

"Era un hombre muy capaz de expresarse en muchos registros", dice el escritor Hugo Burel, otro lector fiel de Mankell. "Es una gran pérdida para la literatura, me parece que es alguien muy difícil de sustituir tanto al nivel de la novela negra como en la literatura en general".

Mankell nació en Estocolmo el 3 de febrero de 1948, y pasó gran parte de su infancia en una comunidad rural, Sveg, donde fue trasladado su padre, un juez. Fue marino mercante en su adolescencia y empezó su carrera literaria como autor teatral y más tarde dirigiría dirigió durante años el Teatro Nacional de Maputo, Mozambique. Comenzó a publicar las novelas de Wallander en 1991, cuando tenía 43 años. Además publicó novelas sin Wallander, obras de teatro y ensayos.

"La solidaridad con aquellos que necesitaban ayuda recorre toda su obra y marcó sus acciones hasta el final de sus días", escribió en su anuncio oficial, la editorial Leonhart, que él mismo había fundado junto a Dan Israel. Mankell era un activista muy preocupado por la situación de Africa y simpatizante de la causa palestina .

Las 11 novelas de Wallander transcurren en la ciudad sueca de Ystad, cerca de Malmo, en la que actualmente se organizan recorridos turísticos dedicados al personaje. La serie termina con El hombre inquieto, en la que el inspector se retira y cede el testigo a su hija Linda, que protagoniza la duodécima novela de la serie, Antes de que hiele.

"Lo que tenía Wallander es que te identificabas de inmediato con él, porque era muy falible, comía mal. En el último libro, como se le hicieron escribir casi obligado, le dio un alzheimer terminal, como para que no lo jodan más", dice Gandolfo a quien, de la serie del inspector solo no le gustaron dos, La leona blanca y Los perros de Riga.

"Wallander y yo no nos parecemos mucho", dijo Mankell alguna vez. La popularudad mundial del escritor y su principal personaje, además, se vio aumentada por tres adpataciones televisivas, dos suecas y una británica (protagonizada por Kenneth Branagh) que aquí emitió Televisión Nacional.

"Si bien no es un autor bestseller ni muy popular, tiene sus fieles seguidores y se han sumado más seguidores últimamente, a raíz del auge de la novela negra", contó una fuente de su distribuidora local. Actualmente en las librerías uruguayas hay 23 títulos de Mankell, muchos de ellos en ediciones baratas de bolsillo. También se encuentra mucho material en las librerías de usados. Nunca es tarde para descubrir a un gran escritor. (Producción: Alejandra Pintos)

SABER MÁS

Maneras de entrar en Mankell

Asesinos sin rostro es la primera novela del inspector Kurt Wallander, es un clásico. El chino es una de las grandes novelas sin su personaje estrella. Finalmente, Arenas movedizas es un relato muy personal.

El eterno femenino de una imaginativa pintora
Murió el maestro de la novela policial, creó la zaga del Inspector Wallander.

HENNING MANKELLEN BASE A AGENCIAS Y EL PAÍS, ESPAÑA

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

literaturanovela policial

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad