Se estrena Star Wars: El Despertar de la Fuerza, la esperada película de J.J. Abrams con Harrison Ford en el elenco. Pero los roles protagónicos recaen en dos nuevas figuras: John Boyega y Daisy Ridley.

El primero es Finn, “definitivamente la representación física de la generación joven en el universo de Star Wars. La saga tiene muchísimos seguidores, pero hay un porcentaje pequeño de gente joven que aún no conoce este universo o que están más interesados en el universo expandido que en las películas. Finn es su vínculo directo. Él no sabe qué es lo que está sucediendo, los droides y los aliens lo asustan. Así que creo que la audiencia disfrutará de un personaje con el que se puede identificar”. Así lo describe Boyega y cuenta más cosas en la siguiente entrevista.

-¿Cómo fue el proceso de audición para la película?

-Mi agente me dijo que J.J. Abrams quería reunirse conmigo y tomarme en cámara audicionando. Yo no sabía cuál era el papel ni había leído el libreto. Así que tomé un tren hacia el centro de Londres, me reuní con J.J., hablamos acerca del papel e hice dos escenas. Fue una experiencia bastante extraordinaria, era muy intimidante saber que era para Star Wars pero no saber los detalles del papel. Después de eso, me volvieron a llamar para más audiciones y luego hice una prueba de cámara con Chewbacca. Eso fue emocionante. Finalmente, recibí el llamado diciendo que el papel era mío, tras siete meses de intensas audiciones.

-¿Recordás el momento exacto en que te enteraste que lo habías conseguido?

-Estaba en el estreno de otra película que había hecho y mi mente estaba más concentrada en si conseguiría este papel o no. Recuerdo que estaba en la alfombra roja y se había filtrado el rumor de que yo estaba siendo considerado para un papel en Star Wars: El Despertar de la Fuerza, así que varios medios me preguntaron si iba a estar en la película. Yo dije: "No he escuchado nada al respecto, pero si J.J. Abrams quiere que yo esté en Star Wars, eso sería increíble". Al día siguiente, recibí un mail de J.J. preguntándome si podía reunirme con él en un pequeño café en Mayfair. Me subí a un taxi y encontré a J.J. en el café, solo, tomando una taza de té. Tuvimos una breve conversación en la que me preguntó si estaba listo, si este papel era posible para mí. Me preguntó si estaría interesado en entrenar, tanto como actor como físicamente, y si era consciente de la gran responsabilidad que esto implicaría. Yo le contesté "Sí, sí a todo. Estaré bien. Haré lo que sea". Y allí me anunció que yo sería la nueva estrella de Star Wars: El Despertar de la Fuerza. Fue como si el tiempo se detuviera. Sentí todo lo que había a mi alrededor, cuántos terrones de azúcar había en una pequeña azucarera en la mesa, mientras por dentro me repetía "Él acaba de decir que soy la nueva estrella de Star Wars: El Despertar de la Fuerza". Tuve que obligarme a respirar. Luego J.J. levantó un vaso de agua y me dijo "Felicitaciones". Yo estaba fuera de mí. Fue probablemente el día más feliz de mi vida. Caminé por Londres como en un mundo de ensueño. No solo se sintió como un triunfo para mí como actor, sino que sentí que estaba pasando a ser parte de la historia, y eso me hizo muy, muy feliz.

-¿Cuánto tiempo pasó desde que te enteraste hasta que hicieron la primera lectura del guión con todo el elenco?

-Me dijeron que el papel era mío una semana antes de la primera lectura grupal. Nos dijeron que lo mantuviéramos en secreto; no podíamos contárselo a nuestras familias ni amigos. Realmente fue muy difícil seguir viviendo normalmente, sin decirle a nadie. Me emocionó mucho que el anuncio se hiciera con la foto en la que estamos todos juntos leyendo el libreto. Fue realmente histórico. ¡Ni siquiera se lo había contado a mis padres! Se enteraron el día de la foto, como el resto del mundo.

-¿Qué creés que le aporta al film la nueva generación de personajes?

-Los nuevos personajes son asombrosos. Son obviamente más jóvenes, con menos experiencia y no se conocen tanto a sí mismos como los otros. No tienen establecida una visión de la galaxia, todavía están aprendiendo.

-¿Eras fanático de Star Wars?

-Yo nací en 1992, así que crecí con las precuelas, y mi padre me recomendó que también viera las películas originales, porque ahí se resuelve la historia con Anakin y Luke Skywalker. Así que miré las originales y me parecieron asombrosas. Todos los actores capturan nuestra imaginación, y fueron definitivamente una gran influencia para actores, directores y cualquier persona en la industria del entretenimiento, desde efectos visuales hasta todos los que hacen que la magia suceda. Star Wars ha sido parte de mi costado geek y fanático de la ciencia ficción. Soy un gran lector de cómics y es parte de ese universo. Y ahora yo estoy dentro de él. ¡Es una locura!

-¿Cuáles eran tus personajes favoritos?

-Han Solo y Chewbacca. También soy un gran fan de R2-D2. Ahora tenemos a nuestro nuevo BB-8, que probablemente sea como el próximo R2-D2.

-¿Tenés alguna película de Star Wars favorita?

-Episodio VI: El Regreso del Jedi, porque se ve a Luke Skywalker en un momento muy vulnerable. En la primera película, él estaba aprendiendo quién era realmente, y aprendiendo acerca de ese mundo especial del que nunca antes había escuchado. El Regreso del Jedi es una grandiosa combinación de drama, comedia y, de alguna forma, expande el universo en términos de los Ewoks y otras criaturas que aparecen en la película. Es mi favorita porque establece a cada personaje en un momento distinto de sus vidas. Podés ver la historia entera desde otro punto de vista.

-¿Cómo te sentiste en tu primer día de rodaje en Abu Dhabi?

-Abu Dhabi y su calor fueron una experiencia única: desiertos gigantes, toneladas de utilería, un set enorme y, obviamente, J.J. Abrams con su entusiasmo y energía. Estábamos allí para filmar la primera parte de la película. Por supuesto, Finn tiene que estar en su traje de Stormtrooper. Fue una combinación de sudor, pasión, fanatismo, cubos de hielo, gotas para los ojos y mucha agua.

-¿Cuándo conociste a Daisy Ridley y cómo fue la relación entre ustedes?

-Nos conocimos durante el proceso de audición y fue importante para nosotros tener química. Desde entonces, nos hemos hecho grandes amigos y nos divertimos mucho. Es gracioso, porque estamos pasando por la misma experiencia de estar en una película enorme. Contando chistes y cantando canciones todas las mañanas, lo que a los demás no les gustaba demasiado, pero nosotros hacíamos lo nuestro. La audiencia sentirá que estos dos extraños, que vienen de mundos muy distintos pero de alguna forma se parecen, están formando un vínculo y hay una amistad real entre ellos.

-Contamos acerca de tus canciones de rap.

-El álbum oficial de Star Wars de Daisy Ridley y John Boyega se creó durante un recreo en el desierto. No siempre estábamos frente a las cámaras, así que teníamos mucho tiempo para relajarnos. Decidimos inventar canciones de rap sobre nuestra experiencia. Consideralo poesía.

-¿Qué pensás de BB-8?

-Es maravilloso, tan adorable y carismático… y un poquito rebelde. Estoy empezando a preguntarme si será un primo lejano de R2-D2. BB-8 es encantador para trabajar. En Star Wars tenemos animatrónica y marionetas, y BB-8 es una combinación de ambas. A veces es algo grosero y podría mejorar un poco su actitud; pero siendo un droide que acaba de conseguir este papel, tiene un largo camino por andar.

-Hablanos de J.J. Abrams como director.

-Es el mejor director para un actor. Entiende el balance entre el aspecto técnico y el artístico. Saca lo mejor de su equipo técnico y de su elenco; no está satisfecho hasta que encontramos el equilibrio, eso es lo que adoro sobre J.J. Además, es un fanático de Star Wars y es muy enérgico en el set. Tiene su micrófono siempre con él y se la pasa haciendo beat box, poniendo música. Es un hombre muy vigoroso. Desde la perspectiva de un actor, da las mejores indicaciones para una escena y te ayuda a sacar lo mejor de tu personaje. Ha sido muy divertido trabajar con él. No le podrían haber dado esta oportunidad a alguien mejor. Se conecta con las Star Wars originales, en donde había peligro, pero no era un peligro dramático. Es un peligro a lo Star Wars, excitante y emocionante, y eso es algo en lo que J.J. ha tenido mucha influencia y ha hecho un gran trabajo. Acepta la modernidad con la tecnología CGI, pero al mismo tiempo está homenajeando al pasado con efectos físicos.

-¿Cómo fue trabajar con Harrison Ford?

-Por cómo trabaja en el set, tiene un profundo entendimiento de los aspectos artísticos de filmar una película, así como de la parte técnica que implica. De él aprendí que, no importa en qué película actúe después de esto, actuar es un balance entre lo artístico y lo técnico. Como artista, estás interpretando un papel. Pero la cámara es el ojo de la audiencia y tenés que facilitar eso. Tenés que favorecer la iluminación, las posiciones y los efectos especiales. Harrison sabe cómo hacer todo eso y lograr un buen equilibrio, pero también se divierte y crea un ambiente cómodo en el set. Salía con nosotros después de filmar. Lo llevé al sudeste de Londres a un bonito restaurante nigeriano, y me contó todo lo que le ha pasado y lo que ha visto durante sus años de carrera. Fue grandioso aprender de un actor como él. Es un gran hombre.

-¿Y con Oscar Isaac?

-Definitivamente lo adoro. Es muy elocuente y tiene un gran sentido artístico. Se toma todo esto muy en serio pero, a la vez, con un personaje como Poe, es muy carismático, guapo y divertido.

-Tuviste que entrenar muy duro para el personaje de Finn.

-En un papel como éste y en una película como Star Wars: El Despertar de la Fuerza hay muchas escenas de acción. Tuvimos que aprender un poco de combate mano a mano y cómo usar las espadas láser, así que tuve que pasar por más de siete meses de entrenamiento. Yo ponía música de Star Wars mientras lo hacía, había mucho John Williams en los parlantes del gimnasio. También hice ejercicio en intervalos, boxeo, levantamiento de pesas, y ejercicio cardiovascular, como correr, saltar. Cuando empezamos a filmar, sentí que realmente estaba preparado.

-¿Fue duro el entrenamiento de combate?

-Lo fue. Nuestras espadas láser eran muy pesadas, lo que te da una sensación del gran poder y de la fuerza que contiene esta arma. Debés ser fuerte y tener la habilidad para manejarlo. Pero ha sido muy divertido porque siempre he querido blandir una espada láser. Trabajamos con palos de madera durante mucho tiempo porque era más seguro, para acostumbrarnos al movimiento y aprender las coreografías.

-¿Cómo fue la experiencia de estar en Pinewood Studios?

-Increíble. Cuando entrás en el set, te deja sin aliento. Los sets mantienen el estilo que tenían en las primeras tres películas originales. Es más fácil actuar cuando todo es físico, todo está a tu alrededor y podés jugar con ello. Es la magia de Star Wars, y es algo que George Lucas creó y nosotros definitivamente lo estamos continuando.

-¿Fue divertido estar rodeado de todas esas criaturas?

-Soy un gran fanático de las películas con criaturas y me encantan los efectos especiales. Me fascina que las criaturas estén ahí frente a mis ojos. Tenemos un grandioso equipo que fabrica las marionetas. Es muy divertido cuando las cámaras no están rodando pero ellos se quedan en la acción, entonces los robots siguen activos y de repente te encontrás teniendo una conversación con una cantidad de especies que nunca antes habías visto. La pasamos muy bien.

-Hay una gran expectativa a nivel mundial por este film. ¿Cómo te hace sentir eso?

-Siento mucha responsabilidad porque Star Wars es más que solamente las películas, aunque sean el corazón de Star Wars, también hay videojuegos y cómics. Quiero asegurarme de que los fans salgan del cine satisfechos y que tengan mucho de lo que hablar.

-¿Qué es lo que más estás deseando del estreno del film?

-Deseo poder sentarme en el IMAX de Waterloo, porque es el cine al que solía ir cuando era pequeño, y ver la película con mi familia y amigos. Disfrutar como un fan más. Quiero ir con mi camiseta de Chewbacca, poner refresco en mi vaso de R2-D2 y pasar un gran rato. Eso es todo lo que deseo.

john boyega