Es una de las actrices más bellas y taquilleras de Hollywood. Su rol de Rachel en Friends dejó una huella imborrable en su carrera como comediante. Pero Jennifer Aniston quería probar el drama y lo logró con Cake (2014), donde encarnó a una adicta.

Jennifer Aniston no puede sumergirse en una pileta o en el mar. Este trauma le quedó desde la infancia. "Cuando era pequeña iba con mi triciclo por el borde de una piscina, me caí e intenté salir. Mi hermano quería ayudarme pero no podía sacarme", relató. Y le generó un miedo tal que la fobia a meterse bajo el agua la persigue hasta hoy.

Aunque no es lo único que le provoca gran rechazo. También le pone los pelos de punta las preguntas obvias. Tras la ruptura con Brad Pitt (con quien estuvo casada cinco años) le irritaba que quisieran saber cuándo volvería a contraer matrimonio. Y desde 2011 que encontró su media naranja (el actor Justin Theroux), la persiguen para saber si planea ser mamá.

No todo fue color de rosas. Llevó a cuestas varios dramas. Tiene un ojo bizco que se lo corrigen en las fotos. Aniston pensaba que no era inteligente porque no podía retener la información en su época de estudiante. Recién a los 20 años descubrió el motivo: padecía dislexia. Lo supo gracias a un análisis al que se sometió para hacerse un par de lentes. Le dieron un texto, le plantearon diez preguntas basadas en lo que debía leer y solo acertó tres. Aquel diagnóstico cambió su vida: "sentí como si los traumas de mi infancia hubieran muerto, se explicaron las tragedias y dramas", contó en una entrevista concedida a The Hollywood Reporter.

La relación con su madre, Nancy Cow, estaba lejos de ser perfecta. Aniston la recuerda demasiado crítica y exigente. Cow trabajaba como modelo y su hija siempre la vio "preciosa e impresionante", pero ella no se sentía así. Y a pesar de haber sido elegida en reiteradas ocasiones como la más bella del mundo, Aniston aún cree que no goza del "tipo de luz" que sí tiene su madre.

Se dijo que anteponer su carrera a ser madre habría motivo de divorció de Brad Pitt. Ella desmintió esos rumores: "Nunca en mi vida dije que no quería tener hijos. Quise, quiero y querré", confesó en 2005. Y proyectó casarse y dar a luz en los siguientes cinco años. Lo primero se concretó cuando dio el sí con Justin Theroux en agosto de 2015. Lo conoció en una isla. Aniston vacacionaba con Courtney Cox, excompañera de Friends y él rodaba Tropic Thunder. Robert Downey Junior los presentó en una cena.

La pareja no tiene hijos y la prensa se lo recuerda a menudo. Aniston, de 47 años, asegura que no haber sido madre no significa que haya postergado parte de su femeneidad. Y no le parece justa "este tipo de presión sobre las mujeres". Fue madre en la ficción y lo vivió de forma intensa. En una charla por su último filme, Mothers Day, dejó la puerta abierta: "Todas mis amigas son mamás, si llego a serlo celebraré el Día de la madre".

John Aniston era actor pero puso "cara de pánico" cuando su hija se anotó en una escuela artística. Ella estaba segura de que era su vocación pero su padre opinaba que una carrera tradicional le daría más estabilidad. Temía que sufriera, que fuera rechazada, pero ella se empecinó y lo consiguió.

No duraba en ningún empleo: fue mensajera dos días, mesera otro tiempo y trabajó en telemarketing un par de semanas. Se mudó de NY a Los Ángeles porque no la elegían para ningún casting. Solo le daban papeles en teatro y Aniston sabía que con eso "no pagaría la renta". Tiempo después, consiguió un rol en la serie Molloy que duró seis episodios, pero le sirvió para abonar el alquiler de su primer apartamento.

La revista People volvió a elegir a Aniston como la mujer más bella en 2016. La designación es coherente con su realidad: la actriz se siente más plena a los 47 que cuando tenía la mitad de años ¿La receta? Se levanta a las cinco de la mañana para hacer yoga y pilates, se lleva pesas de 4 kilos cuando se va de viaje, estira antes de acostarse y se cuida en las comidas. Su desayuno incluye un batido de banana, cerezas, proteínas en polvo, almendras y antioxidantes.

Contó que se puso las pilas con la dieta después de que un agente le dijo que tenía unos kilos de más y que esa imagen podría perjudicar su carrera. Cambió su hábito alimenticio y empezó a prestar atención a lo que ingería, aunque de vez en cuando se da un gusto y se permite comer unas ricas golosinas.

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