ABIERTO DE AUSTRALIA

Serena Williams avanza de forma arrolladora

Su arrollador paso deja en evidencia que Serena Williams está absolutamente decidida a dejar atrás las decepciones para conquistar su Grand Slam número 24, con lo que igualará a la australiana Margaret Court, quien lidera la estadística con un certamen de los grandes más que la estadounidense.

Las derrotas en las dos últimas finales (Wimbledon y US Open 2018), parece que van a quedar atrás porque Serena está resuelta a volver a ser esa jugadora imbatible.

La agresividad y contundencia de su juego, ese estilo que la impulsó para batir sus propias marcas, volvió a aparecer en el Abierto de Australia y lo padeció la canadiense Eugenie Bouchard, a la que aplastó con un contundente 6-2 y 6-2.

Serena está intentando reiventarse para igualar primero y superar después el récord de Court. Nadie puede cuestionarle que quiera seguir siendo la dueña y señora del circuito WTA, mucho menos cuando en este comienzo del primer Grand Slam del año apenas cedió seis juegos.

Australia, por otra parte, es uno de sus torneos preferidos, no en vano ya lo ganó siete veces (el mismo número que ostenta en Wimbledon) y ahí solamente la supera la propia Court que lo conquistó en once ocasiones.

Después de haber dejado atrás los problemas físicos y sus problemas extradeportivos que mermaron su rendimiento la pasada temporada, la estadounidense jugará ahora contra la ucraniana Dayana Yastremska por un lugar en octavos de final.

En tanto, la última ganadora del US Open, la japonesa Naomi Osaka, se impuso a la eslovena Tamara Zidansek por 6-2 y 6-4, aunque terminó el partido con problemas físicos.

“Pude terminar y ganar el partido, así que no es un gran problema”, dijo la japonesa de 21 años.

Su siguiente desafío será la taiwanesa Su-Wei Hsieh, preclasificada 28, quien derrotó a la alemana Laura Siegemund por 6-3 y 6-4.