JAPÓN

El eco de la histórica victoria de Uruguay ante Fiji en el Mundial de Japón traspasó fronteras, despertó interés y sobre todo, el reconocimiento a un país que apostó a un proceso serio, planificado y ordenado para ir sorteando y cumpliendo con sus objetivos.

De aquella selección totalmente amateur que aterrizó en Inglaterra 2015 y que por su condición despertó mucho interés, sobre todo en sus rivales, mucha agua pasó por abajo del puente de una Unión de Rugby del Uruguay que no paró de crecer, transformarse y animarse siempre a más.

Hoy los resultados están a la vista. Los Teros dieron el primer gran batacazo de Japón 2019. Vencieron a Fiji y volvieron a conquistar al mundo del rugby, esta vez no por el amateurismo sino por lo que dio un equipo que se preparó como nunca para ir en busca de un premio grande: ganar.

“Para Uruguay es muy importante lo que consiguieron los chicos, fundamentalmente porque esto no hace más que confirmar que estamos por el buen camino, que el trabajo de muchos años está dando sus frutos. Hemos recibido mucho apoyo de World Rugby, también de la Unión Argentina de Rugby y también de muchos países que han ido a Uruguay a jugar en diferentes torneos. Entonces de alguna manera, obtener resultados es como demostrar que el sistema funciona, que todo lo que World Rugby invierte en estos torneos para los Tier 2 es para que los equipos se vuelvan más competitivos en los Mundiales. Eso dio sus frutos y está bueno que así sea y que así se lea, porque nos ayuda pensando en el futuro para crecer, que es lo más importante”, le contó a Ovación Sebastián Piñeyrúa, presidente de Sudamérica Rugby, uno de los hombres importantes en el crecimiento de la ovalada en el Uruguay en los últimos años.

Por otra parte, Pablo Ferrari, presidente de la Unión de Rugby del Uruguay (URU), remarcó el interés que despertó en el resto del mundo la gran victoria de Los Teros: “El día después del partido los ecos seguían. Los mensajes no paraban de llegar y uno de ellos era del embajador uruguayo en Sudáfrica, César Rodríguez, quien me contó que los directores de los colegios sudafricanos más importantes lo felicitaron por lo que había logrado la selección y eso para nosotros es algo enorme, porque más allá de que sea una nación totalmente identificada con el rugby, le abre las puertas a Uruguay como una marca país. Muchos embajadores nos dicen que a veces se hace imposible llegarle a otros países con un negocio, con el turismo o con un producto y de repente aparece un batacazo deportivo de esta magnitud y son cosas que debemos aprovechar en todo sentido”.

Desde el punto de vista institucional, Ferrari expresó que “la URU viene siendo muy valorada, sobre todo por el trabajo de los últimos años pero no solo desde el punto de vista deportivo ya que se mira con muy buenos ojos lo social y en eso estamos trabajando en zonas de contexto crítico y también introduciendo el rugby en las cárceles”.

Sin lugar a dudas que el rugby uruguayo tendrá un antes y un después tras vencer a Fiji, pero para Piñeyrúa “esto recién empieza. Aún quedan muchas cosas por demostrar y crecer. Se nos viene Georgia, la idea es ganar, pero después están Australia y Gales, dos encuentros para que Los Teros demuestren que también crecieron para enfrentar y estar a la altura de los Tier 1 que ocupan el primer escalafón del rugby mundial”.

Los Teros deslumbraron al mundo y el cumplieron el primer gran objetivo: vencer a Fiji. Ahora van por más. Quieren seguir haciendo historia.