VELERO

El 23 de marzo, el velero francés L'Esprit d'Équipe (yate de 17 metros de eslora) se comunicó con las autoridades del puerto de Punta de Este y manifestó su necesidad de entrar a puerto a pesar de la prohibición en curso. Debido a las dificultades de comunicación por radio y estando el barco ya a punto de ingresar por boca chica, salió a su encuentro una lancha de prefectura para interceptarlo e interrogar al patrón. Este manifestó que tenía un tripulante con necesidad de atención médica, una vía de agua y desperfectos en las máquinas.

Fueron escoltados a la zona de cuarentena del puerto de Maldonado donde una emergencia médica atendió la urgencia del tripulante y Migraciones informó el rechazo de ingreso al país y que debían abandonar el mismo una vez solucionados los inconvenientes técnicos de a bordo.

No es la primera vez que este barco recala en Punta del Este. L'Esprit d'Équipe participó en la cuarta edición de la regata Whitbread (1985-1986), con el mismo nombre, patrocinado por la empresa Bull y con Lionel Péan como skipper. El recorrido era Southampton, Sudáfrica, Nueva Zelanda, Punta del Este y finalizaba en Portsmouth.

L'Esprit d'Équipe, ese barco veterano y de bonitas líneas que hoy cumple su cuarentena sin pena ni gloria en la escollera del puerto de Punta del Este ganó dicha regata Whitbread Round The World 85-86 y tres de las cuatro piernas de la misma. Durante la estadía de la Whitbread en Punta del Este, en su época gloriosa, estuvo amarrado no muy lejos del lugar que hoy solitariamente ocupa. Las vueltas de la vida.