MI OPINIÓN
FERNANDO PARRADO
Muy pocos pilotos han construido una carrera exitosa, como la de Sir Jackie Stewart, una vez que deciden retirarse de las competencias. La trayectoria de “JYS” puede medirse en millones anualmente, ya sea como embajador de grandes marcas, así como sus honorarios como conferencista global, que no bajan de US$ 150.000 la hora. Para ello, se requiere de una fórmula muy compleja.
En primer lugar, haber podido disfrutar de un excelente pasado deportivo, que significa haber ganado muchas carreras y campeonatos del mundo dentro de la Fórmula 1.
Los pilotos son famosos en su país de origen, pero para desarrollar una capacidad de generar contratos importantes, el piloto debe ser reconocido globalmente. Segundo, debe contar con “el deseo y el hambre” de trabajar más allá de las competencias.
Algunos como Fernando Alonso o Mark Webber han desarrollado intereses comerciales y otros simplemente se contentan con trabajos en televisión. Sir Jackie Stewart comprendió “su valor” para los patrocinadores, por eso las ofertas le “llovían”.
Su última carrera fue en 1973 y aún continúa marcando la diferencia y aportando prestigio. ¿Cuántos lo harán en 2065?