Johnson había finalizado segundo en el 2015 y cuarto en el 2014 en el US Open. El año pasado estuvo muy cerca de quedarse con el título, pero tres putts en el green del hoyo 72 le costaron el campeonato. Dustin aprovechó esa experiencia para aprender a controlar sus nervios definiendo un torneo de la jerarquía.

La clave para su victoria fueron sus tiros de salida. Uno de los pegadores más fuerte del tour encontró un alto porcentaje de fairways y eso le facilitó mucho el recorrido de Oakmont Country Club (par 70 de 7.254 yardas).

El actual número tres del mundo tomó la delantera con dos birdies en los primeros nueve hoyos. En el green del cinco ocurrió un incidente muy particular. Mientras Johnson se preparaba para tirar su putt, su pelota se movió. La regla establece que si el jugador no provocó el movimiento de la pelota, no corresponde aplicarle una multa. De lo contrario la penalidad sería de un golpe. Pero la pelota se movió antes que Dustin apoye su putter en el suelo, con lo cual era muy claro que el no había provocado el movimiento.

Los greens estaban tan rápidos que la pelota se movía con facilidad ante cualquier ráfaga de viento. Este hecho hizo explotar las redes sociales, en donde varios de los mejores jugadores del mundo manifestaron su descontento con el accionar de la USGA y dieron su apoyo a DJ. Al finalizar el hoyo 72 se abrazó con su hijo y su esposa en el green y recibió las felicitaciones del mejor golfista de todos los tiempos, Jack Nicklaus. Así cumplió su sueño y se transformó en un "Major Champion".

Esta victoria le reportó importantes puntos para el ranking mundial, en el que previo a este certamen se ubicaba en el sexto puesto. Ahora está tercero en la FedEx Cup (ranking anual del PGA Tour) gracias a los 600 puntos obtenidos y se embolsó un cheque de USD 1.800.000.

US OPEN 2016RAFAEL RODRÍGUEZ LARRETA