Las selecciones celestes vencieron a Estados Unidos en Canelones y clasificaron a los Juegos Panamericanos.

Toronto ya dejó de ser un sueño para el hándbol uruguayo, que había visto tambalear la clasificación a los Juegos Panamericanos de este año tras una desafortunada actuación en los Juegos Odesur de Santiago.

Otra vez uno de los deportes más sacrificados del Uruguay, sacó a relucir todo su juego y la garra que lo caracteriza en una serie de ida y vuelta ante Estados Unidos.

En dos partidos de ida y vuelta, tanto el equipo femenino como el masculino, definieron como locales en el gimnasio Sergio Matto de la ciudad de Canelones, que ayer lució repleto para ver en acción a los combinados celestes.

Las mujeres, dirigidas por Miguel Berger, habían ganado el primer partido en suelo norteamericano por 30 a 25 y con mucha confianza esperaban esta revancha para sellar su clasificación a los Juegos Panamericanos.

Y así fue. Las chicas volvieron a jugar otro partidazo, esta vez apoyadas por toda su gente y se quedaron con la victoria en cifras de 24 a 22.

Ya desde el inicio del encuentro, las celestes comenzaron a plasmar su superioridad. Llegaron a poner un parcial de 9 a 4 y luego, se fueron al descanso 13 a 8 arriba.

En el complemento, Uruguay mantuvo la diferencia, pero luego se vino la reacción de las norteamericanas, que llegaron a igualar en 17.

Si bien la Celeste tenía ventaja en la serie, el equipo nunca se desesperó y fue siempre a más. Lo consiguió, puso los goles para cerrar el partido y ganó 24 a 22 para confirmar el pasaje a Toronto.

La selección masculina le puso la frutilla a la torta y redondeó un día histórico para el hándbol uruguayo.

Luego de perder en Estados Unidos 25-21, los varones celestes se reivindicaron y derrotaron a los norteamericanos en Canelones por 28 a 20 para clasificarse a los Juegos Panamericanos.

Ahora, Toronto espera por el hándbol uruguayo en julio.

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