Fútbol

El nuevo estadio es caro, lujoso... pero motivo de burlas: los hinchas rivales le encuentran un curioso parecido al techo del recinto, que costó 900 millones de euros

En pocos días Tottenham Hotspur inaugurará su nuevo estadio en el norte de Londres, tras varias postergaciones debido a la infinidad de detalles de confort que presenta esta obra de 900 millones de euros, pero también por conflictos laborales. El estadio tendrá una capacidad de 62.062 espectadores y será uno de los más caros del mundo.

Las comodidades del nuevo escenario suenan fabulosas: un campo de juego retráctil, incluyendo una superficie sintética por debajo del terreno de juego; numerosos bares e incluso una microcervecería; puestos de comida repartidos en todas las tribunas y una zona de alimentos con más de 60 locales; una plataforma panorámica, para que los aficionados observen la vista de Londres desde el techo del estadio; una zona de conferencias para empresas interesadas en organizar sus eventos.

Pero nada es perfecto: los hinchas rivales se burlan porque su techo, visto desde el aire, se asemeja a la tapa de un retrete...

Tottenham jugó desde 1899 en el estadio White Hart Lane, de 36.284 localidades, hasta la temporada 2016-17. La construcción del nuevo recinto, adyacente a White Hart Lane, comenzó en 2015. Poco después comenzó la demolición del viejo escenario, aunque albergó encuentros hasta mayo de 2017, tras lo cual el equipo alquiló Wembley para sus partidos como local.