Peñarol se presentó en Medellín ante Atlético Nacional y sufrió otra derrota, eta vez 2-0. Terminada la primera rueda del Grupo 4, está último.

Da Silva hizo una radiografía concisa, clara, de lo que debía pasar para que Peñarol se fuera de Medellín con un resultado favorable: “En la parte defensiva, tácticamente tenemos que estar en el 100%, hacer un partido perfecto”; y en ese aspecto estratégico fue así, al menos en parte.

Defendiendo con un 4-1-4-1, con Freitas de eje de la contención por el medio y con Murillo corriéndolas todas -y hasta aguantando algunas pelotas para apoyarse en alguien- desde tres cuartos de cancha hacia adelante, Peñarol resultó desbordado por el flanco izquierdo de su retaguardia, donde Olivera no podía con Ibarbo; incluso fue “perdonado” por la imprecisa definición del Atlético Nacional en varias oportunidades.
Así, entonces, sin llegar al arco rival -al extremo de que lo hizo por primera vez a los 42’ con un remate que metió Aguiar desde media distancia- Peñarol terminó el primer tiempo superado, pero atesorando el empate y, por lo que había sido el trámite, sacándola barata.

Es más, como Da Silva pasó a Viega de la derecha a la izquierda para tapar las subidas de Bocanegra, entorpecer el armado de Guerra por ese costado del mediocampo y “entreverar” los arranques arrasadores de Ibarbo, Peñarol sobrevivió el último cuarto de hora de la primera etapa algo más aliviado que en los 20’ iniciales, donde empezó como para ser goleado.

El complemento arrancó igual e, incluso, hasta hubo una pelota larga que Aguiar no pudo dominar, perdiendo la chance de quedar “de macho” con el arquero contrario, y otra que también quedó dividida entre la entrada solitaria de Costa y la salida apurada de Armani; pero… ahí, cuando Aguirregaray había cerrado su costado y Mac Eachen estaba asentando una gestión impecable, el Atlético Nacional le metió un balazo en la frente a Peñarol, aunque en ese momento el equipo aurinegro no estaba arrodillado.

Cuando se juega de visitante ante rivales profundos en la faz atacante, para sacar un buen resultado el arquero del equipo que defiende debe ser el mejor de la cancha. O al menos no tener ninguna falla; y Guruceaga, que evitó una goleada, no resolvió con eficacia el remate que metió Bocanegra desde lejos.

Ahí, entonces, se acabó todo para Peñarol; porque además salió a buscar el empate, dejó espacios en defensa más grandes que antes y el Atlético Nacional -con el fenomenal Ibarbo- le terminó convirtiendo el segundo.

Peñarol anduvo al 80% de la perfección táctica, pero tuvo caídas de tensión que lo pusieron al borde de la “muerte”, aunque el que se la provocó fue Bocanegra con ese tiro de frente y de lejos no resuelto por Guruceaga. Al fin y al cabo, un tiro de gracia.

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Atlético Nacional: Franco Armani; Daniel Bocanegra, Davinson Sánchez, Alexis Enríquez, Farid Díaz; Alexander Mejía, Sebastián Pérez (77' L.C. Ruiz), A. Guerra, Víctor Ibarbo (74' M. Torres); Jonathan Copete y Marlos Moreno (81' O. Berrío).

DT: Reinaldo Rueda

Peñarol: G. Guruceaga. M. Aguirregaray, F. Buschiazzo, E. Mac Eachen, M. Olivera; R. Viega, N. Freitas (84' H. Novick), T. Costa (58' N. Nández), L. Aguiar; C. Luque (57' C. Palacios) y M. Murillo.

DT: Jorge Da Silva

Goles: 54' D. Bocanegra (AN), 60' M. Moreno (AN)

Árbitro: Heber Lopes (Brasil)

Roja: 85' H. Novick (P)

Amarillas: L. Aguiar (P), M. Aguirregaray (P), M. Moreno (AN), A. Mejía (AN), R. Viega (P)

Estadio: Atanasio Girardot (Medellín)

COPA LIBERTADORESJORGE SAVIA