La Celeste tendrá dos partidos tremendos, de esos que bien pueden marcar su futuro en la Eliminatoria. Después del verticalazo de FIFA, actuando de oficio y quitándole los cuatro puntos Bolivia (uno ante Chile, y tres frente a Perú) la tabla se sacudió bastante.

JOSÉ MASTANDREA

Los trasandinos, rivales directos de Uruguay, quedaron a tiro y con más vida que nunca, y hasta los incaicos, que estaban prácticamente en el fondo de la bolsa y sin posibilidades, recuperaron la ilusión. Se apretó todo mucho más, y se avecinan dos partidos ante rivales de nivel. Ecuador, aún con bajas, es un muy buen equipo, y habrá que tomar las precauciones del caso para enfrentarlo en el Centenario. Esos tres puntos deberán quedar en casa, son los que pesan, los que valen, los que pueden incidir en el futuro. Los de Santiago también valen e importan, pero todos sabemos que el secreto en la Eliminatoria es ganar de local y ‘pellizcar’ de ser posible algún puntito afuera. En medio de la desazón y la tragedia, aparece la Celeste...

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