PEÑAROL

El equipo aurinegro enfrentará este sábado a Progreso con la posibilidad de levantar el primer trofeo en casa.

Desde que se concretó el sueño del estadio propio, el ingenio de los hinchas mirasoles generó una canción que en poco tiempo se transformó en hit y que tenía un pedido especial por parte de la hinchada: “Dar la vuelta en el estadio nuevo”.

Pese a ello, a Peñarol no se le hizo sencillo cumplir con esa meta, pero el próximo sábado podría alcanzarla y aprovechar esa instancia para levantar un trofeo más e ilusionarse con la pelea del Campeonato Uruguayo.

El calendario, los resultados que se dieron y la tabla de posiciones le dio la posibilidad a los aurinegros de salir campeones del Clausura en el clásico del pasado sábado, pero para ello precisaban un triunfo que no llegó. El empate postergó, al menos, una semana más los festejos, aunque tan mal no le habrá caído al plantel y a los hinchas que podrían levantar su primer trofeo en el Campeón del Siglo, con todo lo que eso representa en caso de sumar de a tres, teniendo en cuenta que Peñarol seguiría cuatro puntos arriba de Nacional con tres en juego.

Es que desde que se inauguró el nuevo estadio mirasol, la suerte le ha sido un tanto esquiva a los aurinegros, en algunos casos por no haber conseguido los títulos y en otros por lograrlos afuera de su escenario.

Desde que se inauguró el 28 de marzo de 2016, pasaron tres torneos cortos y un Uruguayo Especial que dejaron un saldo dispar. El primero de ellos fue precisamente el que más dolió para los hinchas aurinegros, ya que el Clausura 2016 se lo quedó Plaza Colonia y además lo consiguió en el Estadio Campeón del Siglo tras el triunfo a domicilio por 2-1. Cabe destacar que Peñarol se terminó quedando con ese Uruguayo, pero las finales se jugaron en el Estadio Centenario ante el equipo Patablanca.

Luego pasaron el Uruguayo Especial de 2016 (que lo consiguió Nacional) y el Apertura de 2017 (ganado por Defensor Sporting).

Fue en el Clausura del año pasado cuando Peñarol volvió a levantar un trofeo, pero una vez más el destino quiso que no pueda festejarlo en el Campeón del Siglo, ya que lo hizo en el Tróccoli con goleada incluida por 4-0 ante Cerro. En 2017, también las finales se jugaron en el Estadio Centenario y eso le impidió al equipo todavía dirigido por Leonardo Ramos levantar una copa en su nueva casa.

Es por eso que el choque ante Progreso será especial y no será uno más. La posibilidad de dar la primera vuelta en su casa seguramente ilusiona tanto al plantel como a los hinchas que acompañarán a los de Diego López en el recinto mirasol.

Además, la obtención del Torneo Clausura es el gran paso para meterse en la definición del Uruguayo más allá de que termine ganando la Tabla Anual o no. Para Diego López también será un duelo especial, dado que puede darle su primer título como entrenador en su primera experiencia en el banco de suplentes del conjunto aurinegro.

El plantel, el partido y el trofeo pueden que se metan en la historia por conseguir dar la vuelta... en el estadio nuevo.

LOS NÚMEROS. Desde que el Campeón del Siglo se inauguró, hace más de dos años, Peñarol ofició de local en 51 partidos, en los que consiguió buenos números, ya que alcanzó 35 victorias, 7 empates y 9 derrotas por lo que suma un 59 por ciento de efectividad en su casa.

Para Peñarol, el Uruguayo 2018 vuelve a ser especial ya que tiene la gran posibilidad de convertirse en bicampeón, un hecho que no logra hace mucho tiempo.

Luego de la obtención del título del Uruguayo en la temporada 2015-16, el aurinegro no aprovechó la chance en el Especial 2016 y ahora tiene una nueva posibilidad.

Tras obtener el Uruguayo 2017, los dirigidos por el “Memo” López van en busca del bicampeonato, un logro que no es alcanzado por el conjunto mirasol desde las temporadas 1996 y 1997, donde además selló el segundo Quinquenio de su historia. Ahora, 21 años después, Peñarol puede volver a ser “bi” y ganar el Clausura es el primer paso.