Da Silva forma la séptima alineación titular en10 partidos, cuando hace cinco que los aurinegros no ganan.

Rotación, rendimiento, suspensiones, aspectos tácticos y estratégicos, y desde hace poco más de dos semanas a esta parte, sobre todo, lesiones.

Esos son, básicamente, los seis motivos por los que en nueve partidos oficiales que Peñarol disputó desde el comienzo del año entre el Torneo Clausura y la Copa Libertadores, Jorge Da Silva ha armado media docena de equipos titulares diferentes, utilizando a 21 jugadores.

Si se podría convenir que la cifra no es menor, hay que agregarle que hoy para jugar contra Racing, el entrenador aurinegro va a presentar por séptima vez una alineación titular distinta, elevando la cantidad de recursos humanos puestos al servicio de la conformación del equipo a 22 futbolistas.

De esa especie de mosaico, a su vez, es posible rescatar que hubo un equipo que el técnico quiso o consiguió poner más veces en el inicio de los partidos, y fue contra El Tanque Sisley, Defensor Sporting, Fénix y Huracán de Argentina: Guruceaga en el arco; Aguirregaray, Valdez, Guillermo Rodríguez y Olivera en la retaguardia; Costa y Nández en la contención; Maximiliano Rodríguez y Aguiar en armado, gestación y salida; y Murillo con Forlán arriba.

Pues bien, por al menos dos de las razones citadas al principio, como las lesiones y el rendimiento de sus futbolistas, esta noche ante Racing el entrenador de Peñarol va a empezar jugando con una alineación que abre una gran incógnita en torno a su funcionamiento, porque está lejos de aquel equipo con el cual empezó disputando cuatro de nueve partidos.

Atrás volverán a actuar juntos Buschiazzo y Mac Eachen, como ante Atlético Nacional en Medellín; Nández y Freitas van a repetir el "doble 5" que sólo integraron contra Sporting Cristal en Lima; va a volver "Maxi" Rodríguez que "desapareció" tras el empate con Sud América en Maldonado luego de haber sido titular en seis partidos, y en lugar de tener "de compadre" en la creación a Aguiar va a tener a Rodrigo Viega; y adelante, junto a la reaparición de Diego Forlán, se registará el debut como titular de Affonso, que suplirá al lesionado Murillo.

A esta altura la sensación es que Da Silva baraja y da de nuevo, aunque ya con la clara participación de un nuevo motivo, no sólo el de formar, encontrar y afirmar un equipo: ganar, porque Peñarol no lo pudo hacer en ninguno de sus últimos cinco partidos; y, como consecuencia de ello, si esta noche no consiguiera hacerlo frente a Racing, el panorama —tanto externo como interno, desde que en ninguno de esos dos ámbitos la situación de los aurinegros es tranquila— se le complica.

La gran siete, entonces, con este cruce de hoy con Racing: la séptima alineación a la que recurre Da Silva responde, o Peñarol y "Polilla" se van a ver en medio de un lío.

Solamente Guruceaga y Aguirregaray fueron titulares en los 9 partidos oficiales que Peñarol jugó en 2016.

Mauricio Affonso debuta como titular: jugó 115’, entrando en seis partidos; y en ocho estuvo en el banco

Tomás Costa fue titular en los nueve partidos que jugó Peñarol; para hoy no está entre los concentrados

Racing ganó dos partidos y empató otros dos; perdió sólo con River Plate. Tiene 9 goles a favor, 6 en contra.

Peñarol "vive y lucha" para ganar el Torneo Clausura, por consecuencia la Tabla Anual, y —por supuesto— el Uruguayo; dada su realidad actual, más que la Libertadores.

En ese sentido, entonces, en el marco de su histórica pugna con el tradicional adversario, para los aurinegros los puntos que disputa por actividad local, acaso no en forma unitaria sino de a tres, valen oro.

Sin embargo, Peñarol como institución, no sólo en lo que tiene que ver con lo que pasa aden tro de la cancha, está atravesando un momento muy especial; único: se encuentra a ocho días de inaugurar el estadio "Campeón del Siglo" y resulta obvio que aún cuando una instancia de este tipo para sus hinchas y socios está más allá de la circunstancialidad de los resultados deportivos; pero es mejor si un acontecimiento de tal magnitud tiene lugar en el contexto de un momento de alegría y euforia.

Pues bien, especialmente esto último, la hinchada de Peñarol lo perdió hace mucho, y si bien no lo va a recuperar con un triunfo ante Racing por el Torneo Clausura, la de hoy es la última ocasión de pasar una especie de publicidad que revitalice el ánimo de sus parciales y los empuje a concurrir en masa a la doble fiesta del domingo 27 y el lunes 28.

Técnico, cerebral y experiente, puede ser algo más que la manija del equipo: su precisión para la pegada, sea en pelotas quietas o en movimiento, lo erigen en una amenaza para un rival al que le hacen goles de distancia.

Reaparece después de la lesión muscular que sufrió frente a Sud América en Maldonado, y lo hace en circunstancias muy especiales: Peñarol necesita que su fútbol, o al menos sus goles, tengan la fuerza de un estandarte.

TORNEO CLAUSURAJORGE SAVIA