CATAR 2022

Guillermo Barros Schelotto se estrenó como técnico de Paraguay, pero en su primer partido ya se le fue gran parte del sueño de dirigir al seleccionado guaraní en un Mundial. Al menos en el próximo, el de Catar 2022. Tal vez su trabajo sea ya pensando en 2026, pero lo cierto es que luego de la derrota 0-1 sufrida ante Chile este jueves a la noche en Asunción por la fecha 13 de las Eliminatorias sería un milagro que lograra la clasificación a la próxima Copa del Mundo.

Martín Lasarte, sin embargo, tiene motivos para tener fe todavía. El elenco trasandino consiguió su tercer triunfo consecutivo y llegó a 16 puntos, los mismos que tiene Uruguay, por lo que pasó a ser un contendiente de mucho peligro.

Un gol que podría decirse fue olímpico de Alexis Sánchez a los 55 minutos (mandó un córner desde la izquierda, se cerró y el arquero Silva en su desesperación por sacar la pelota no hizo más que meterla) definió el pleito entre dos equipos que se jugaban una final, porque el empate los complicaba a los dos y el perdedor (en este caso Paraguay) quedaba prácticamente afuera de la pelea.

Luego de un mejor comienzo de Paraguay, en el que trató de imponer el ritmo en los primeros minutos, Chile se asentó en el campo y con el buen manejo de Arturo Vidal y la inteligencia para profundizar de Sánchez, se adueñó del trámite. El tiro en el travesaño (centro que se cerró) del local Matías Rojas a los 7' minutos fue lo que hizo despertar a La Roja, que hasta ahí solo se había defendido.

La Albirroja se quedó sin reacción. No tuvo ideas para contrarrestar lo que le propuso Chile: un equipo compacto del medio hacia atrás, que cerró las líneas de pase, veloz para cubrir espacios, también para desdoblarse cuando tomó el balón y, sobre todo, cuidó muy bien la pelota. Todo lo contrario fue Paraguay, que tuvo muchísima imprecisión con el balón, motivado seguramente por la desesperación (o frustración) que le causó no poder vulnerar el planteo rival.

Paraguay (al que Uruguay aún debe visitar el año próximo) fue un conjunto estirado, quebrado por momentos, que dejó espacios a espaldas de su línea media que de haber aprovechado mejor Chile pudo haber conseguido una victoria más holgada. Y ofensivamente fue prácticamente inexistente, porque casi no exigió a Bravo, jugó apurado y terminó tirando centros para nadie. Sí, el juego aéreo que fue el fuerte del seleccionado guaraní, parece haberlo abandonado.

Chile sigue en carrera hacia Catar; Paraguay quedó rezagado y a punto de abandonar. Para Uruguay el mejor resultado hubiera sido el empate, pero este resultado para la Celeste no es tan trascendente si le gana a Argentina.