NACIONAL

El delantero tricolor jugó menos de lo esperado, pero tuvo buenos números.

Nacional anunció sobre el mediodía de ayer que había llegado a un acuerdo con Octavio Rivero para rescindir el contrato que unía al delantero con la institución tricolor.

De hecho, Rivero ya tiene nuevo equipo porque el Santos Laguna -dirigido por Guillermo Almada y con Brian Lozano en el plantel- será el nuevo destino del olimareño.

De todas maneras, cabe repasar lo que fue el paso de Rivero por Nacional, porque a pesar de que jugó poco sumó muy buenos números. Claro está, las lesiones lo aquejaron bastante y eso llevó a que también tuviera pocos minutos.

Tener adelante a un delantero y referente en el plantel como Gonzalo Bergessio no le hizo la tarea sencilla a Rivero, pero fueron cinco los partidos que se perdió el delantero por lesión.

El primero de ellos fue el de la Supercopa Uruguaya, donde Nacional se terminó quedando con el título al ganar el clásico, mientras que durante el Campeonato Uruguayo se perdió los otros cuatro.

Dos de estos encuentros fueron por la Copa Libertadores enfrentando al Zamora, de visitante, y al Atlético Mineiro de local, mientras que los otros dos fueron por el Torneo Apertura ante Boston River y Danubio.

Eso sí, pese a las lesiones, cuando estuvo en cancha Rivero rindió y buena parte de eso se puede apreciar en sus números, ya que tiene un gol cada dos partidos y si se tiene en cuenta que no era el delantero titular, sus estadísticas podrían ser bien consideradas.

De hecho, disputó 514 minutos repartidos en 10 juegos en los que anotó cinco goles por el Campeonato Uruguayo. Los tantos fueron ante Liverpool, Wanderers, Cerro, River Plate y Fénix.

Por Copa Libertadores su rendimiento no fue tan bueno, pues disputó 132 minutos en cuatro juegos y no pudo anotar ningún gol.