Matías Mier empezó a entrenar en la Tercera División de Peñarol.

Llegó al club -“gracias a la gestión que hizo mi representante”- porque no quería perder forma física ni futbolística en este mes y monedas que resta para terminar la temporada, y porque, en definitiva, desea tener una nueva oportunidad en los aurinegros. “El tiempo dirá si se da o no, lo que sí tengo claro es que quiero jugar en el fútbol uruguayo”, confesó en la mesa de Ovación, en El País TV.

El lateral-volante de 26 años regresó del fútbol qatarí después de una rara experiencia. “Me fui solo, fui a otro mundo, con otras costumbres, y me sirvió para crecer en todos los aspectos, pero las cosas se complicaron en lo económico y ya no valía la pena hacer tanto sacrificio, estar tan lejos de los afectos, de lo que uno quiere, si no te pagan, y si no estás jugando en el equipo”, dijo.

Surgió en Rentistas, después tuvo varias y destacadas temporadas en Fénix, hasta que dio el paso grande en Peñarol, en aquel equipo aurinegro que acarició la gloria en la Copa Libertadores 2011. Después estuvo tres años en la ‘U’ Católica de Chile, en Santiago Wanderers, y en la pasada temporada, defendió a Rentistas, y con sus goles, estuvo a punto de salvar al club del descenso. “No se dio, peleamos hasta el final, estuvimos muy cerca, pero no se pudo”, recordó Mier.

Hoy sueña con el futuro. “Me encantaría quedarme en Peñarol. Estoy entrenando con la Tercera. El ‘Tito’ Goncálvez me abrió las puertas, me hace sentir muy bien. Me recibió y me dijo: ‘estás en tu casa’, y eso lo dice todo”. Clásico a la vista, y Mier ya lo vive. “Jugar un Peñarol-Nacional es único, no hay nada igual. Ojalá sea una fiesta, como debería ser, pero es un partido único...”, afirmó.

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