LONDRES

El Manchester City extendió este domingo su dominio reciente en la Copa de la Liga del fútbol inglés con una victoria 2-1 sobre Aston Villa en la final jugada el domingo en Wembley, donde goles de Sergio Agüero y Rodri le permitieron al equipo de Pep Guardiola ganar el trofeo por tercera temporada consecutiva.

El City, que con este título ha ganado la competencia en cinco de las últimas siete temporadas, dominó gran parte del partido, por lo que no fue extraño que recién jugada media hora se pusiera 2-0 gracias a un derechazo de Agüero cerca del punto penal al minuto 20 y de un cabezazo del español Rodri a los 30.

Sin embargo, un resbalón del defensor del City John Stones facilitó una rápida transición ofensiva del Aston Villa que terminó en un cabezazo del tanzano Mbwana Samatta en el que no pudo hacer mucho el arquero chileno Claudio Bravo. El equipo dirigido por Dean Smith volvía a meterse en el partido justo antes del entretiempo.

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Sin embargo, la segunda mitad no estuvo a la altura de la primera y hubo pocas oportunidades claras hasta que Bravo se lució con una gran atajada ante un cabezazo de Bjorn Engels que terminó en un poste en el minuto 87.

Tras ese susto, el City solo tuvo que aguantar las embestidas del Aston Villa en los minutos finales para convertirse en el primer equipo en ganar la Copa de la Liga tres temporadas seguidas desde que Liverpool logró cuatro títulos en línea entre 1981 y 1984.

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Los dirigidos por Guardiola habían llegado a esta final envalentonados por su victoria como visitante ante Real Madrid por la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones a mitad de semana.

"Tres títulos seguidos es un gran éxito. Es regularidad", dijo el entrenador español tras el partido. "Fue increíble. Sufrimos en los primeros minutos y en los últimos. Tuvieron dos oportunidades claras en los primeros minutos, pero jugamos muy bien".