Gracias a Bengoechea y al Torneo Apertura que ganó, Peñarol llegó a la final con aire.

Christian Ferreyra hace sonar su silbato, lleva los brazos al cielo y el Estadio Centenario se transforma en una verdadera caldera por el calor que le ponen sus hinchas al festejar un nuevo título.

Los futbolistas corren por el terreno de juego, se abrazan y saltan. Algunos hinchas también ingresan al campo e intentan sumarse a los jugadores. En la Ámsterdam comienzan a encenderse las bengalas.

Peñarol es campeón del Uruguayo 2015/2016 y el primer cántico que baja desde los cuatro costados del estadio es el siguiente: "Olé, olé, olé, olé... ¡Pablo, Pablo!".

La dedicatoria, claro está, refiere al "Profesor" Bengoechea, entrenador del campeón del Apertura y que se fue en verano, por decisión del club, cuando faltaban pocos días para comenzar la actividad oficial.

Bengoechea, quien condujo al equipo en medio Uruguayo, fue responsable directo de que ayer Peñarol estuviera disputando esta instancia y que también haya transitado el Clausura con cierta tranquilidad.

Ayer, el "Profesor" también fue partícipe de la fiesta, pero en el rol de hincha. Junto a su familia, se ubicó en la Tribuna América para alentar al equipo. Como es habitual, su presencia no pasó desapercibida entre los hinchas que le pidieron fotos y autógrafos.

Que el letrista no se olvide del "Profesor"... Los hinchas, se acordaron.

De la mano del "Profe", Peñarol se quedó con el Torneo Apertura con 31 puntos (uno más que Nacional), producto de nueve victorias, cuatro empates y dos derrotas. En el verano, tras el mal desempeño en los clásicos (un empate y una derrota), el club decidió despedirlo. En su lugar vino el "Polilla" Da Silva.

A comienzo de la temporada, luego del alejamiento del "Tony" Pacheco, Bengoechea eligió a Marcelo Zalayeta como capitán del equipo. El experimentado delantero llevó el brazalete durante el Apertura, pero en el verano, tras la decisión del club de cambiar al DT, adelantó su retiro y se fue con el "Profe".

PEÑAROLÁNGEL ASTEGGIANTE