SELECCIÓN
El maestro Tabárez los incluyó en el equipo titular y jugaron un partido de gran nivel.
Dos de los tantos hijos pródigos del proceso Tabárez tuvieron su oportunidad, demostraron que tienen nivel y que están a la altura como para estar en el Mundial de Rusia 2018.
Guillermo Varela (hoy cumple 25 años) y Diego Laxalt (25) fueron las apuestas y aciertos del maestro en el partido frente a República Checa por la China Cup.
Los laterales cumplieron con creces sus funciones y mandaron un mensaje más que positivo para que cuando el entrenador celeste tenga que pasar raya, ellos estén del lado Mundial.
Varela por el lateral derecho y Laxalt por el izquierdo tuvieron un muy buen desempeño que hizo olvidar la interrogante en cuanto al nivel futbolístico de Maximiliano Pereira en la actualidad y la ausencia de Martín Cáceres por lesión. Tabárez demostró otra vez que hay recambio. Y del bueno.
Mucho se especulaba con la inclusión del jugador del Genoa de Italia ya que se intuía en la previa (así lo había probado el entrenador uruguayo en los entrenamientos previos) podía ser titular pero en la zona de volantes. Pues bien, el técnico sorprendió para bien y lo puso por la banda izquierda para que el jugador rindiera y demostrara su polifuncionalidad.
El futbolista nacido en la cantera de Defensor Sporting cerró su sector con corridas importantes, se acopló bien a una zaga que mostró firmeza y solidez y, además, siempre buscó la salida en ataque haciendo uso de su velocidad y buen manejo de la pelota.
Varela también le puso un candado a su sector defensivo y fue parte de la buena presión alta que Uruguay ejerció durante todo el encuentro, pero con más énfasis en la primera mitad, donde la Celeste hizo la diferencia en el marcador.
Por la derecha, el jugador de Peñarol, también surgido en la cantera aurinegra, se encargó de pasar permanentemente al ataque y buscar triangulaciones con los volantes, sobre todo asociándose con Nahitan Nández por la banda derecha.
Esa fue la tónica de la presentación de los jugadores que demostraron un excelente nivel en la selección en una prueba no tan exigente por el rival, pero sí por la situación, ya que todos los futbolistas que hoy están en la China Cup se están jugando nada menos que un pasaje al Mundial.
De todas maneras, el análisis de su actuación no solo se reducirá a este encuentro en el momento en que Tabárez tenga que pasar raya, pero vaya si será importante lo mostrado por Varela y Laxalt ante República Checa.
El camino.
Guillermo Varela y Diego Laxalt son de los fieles representantes del proceso Tabárez ya que comenzaron su camino en selecciones juveniles hasta desembocar en la mayor.
Los dos fueron pieza clave del equipo uruguayo Sub 20 que obtuvo el vicecampeonato en el Mundial de Turquía 2013 bajo la conducción de Juan Verzeri.
Varela se desempeñó siempre por el lateral derecho de esa selección, mientras que Laxalt era una de las opciones en la zona de volantes, con cierta vocación ofensiva, pero con un gran despliegue para colaborar también con la contención en ese punto clave de la cancha.
Siempre estuvieron en la órbita del proceso, bajo la atenta mirada del cuerpo técnico celeste mientras jugaban en sus respectivos clubes.
Laxalt, hoy en día asentado como titular en el Genoa, equipo que milita en la Serie “A” de Italia, jugó su cuarto partido con la selección mayor tras su debut el 6 de octubre de 2016 con triunfo ante Venezuela por 3-0, mientras que Varela, pieza clave en Peñarol, completó su segunda presencia con La Celeste tras el debut el 10 de noviembre de 2017 en el empate sin goles frente a Polonia.
Pese a eso, Varela y Laxalt le demostraron a Tabárez que están aptos para jugar el Mundial y ayer sacaron su pasaje a Rusia.