PEÑAROL

“Leo” Ramos superó la racha de partidos ganados de Ribas y ahora va por la de Aguirre: ¿qué le queda?

El arranque perfecto del Peñarol de Leonardo Ramos en este Torneo Clausura se gana cada vez más aplausos y elogios. Atrás, dejó las dudas sobre la continuidad en su cargo y conduce a un equipo que hoy está muy cerca de abrochar esta segunda parte del año e incluso se ilusiona con ganar la Tabla Anual para llegar con ventaja a las finales.

Nueve partidos, nueve triunfos. La estadística marca que este torneo pinta para meterse entre los mejores de la historia del club. “Leo” ya pasó la marca de Julio Ribas y va ahora por la de Diego Aguirre, un histórico dentro de la institución.

En el Clausura de 1999, Peñarol obtuvo el torneo (en ese entonces había un equipo menos) con 38 puntos (nueve más que el escolta Nacional): 12 victorias, dos empates y ninguna derrota. El demoledor equipo de Julio Ribas, con Pablo Bengoechea, Antonio Pacheco y Walter Pandiani comandando la ofensiva del famoso 4x4 (por el promedio de goles), hilvanó ocho triunfos en las primeras ocho jornadas: 4-0 vs. Rentistas, 4-2 vs. Frontera de Rivera, 4-2 vs. Rampla Juniors, 4-1 vs. Danubio. 6-1 vs. Paysandú Bella Vista, 5-1 vs. Deportivo Maldonado, 6-1 vs. River Plate y 4-0 vs. Defensor Sporting. En la novena jornada, la racha se cortó con el empate 1-1 ante Liverpool. Luego volvió a la senda del triunfo hasta la última fecha cuando igualó sin goles ante Cerro.

Con el triunfo del último miércoles, ante Sud América, Ramos superó esa barrera y ahora le queda la de la “Fiera” de 2010.

En ese año, el Peñarol de Diego Aguirre se quedó con el Clausura con 43 puntos (14 más que Cerro que fue subcampeón), producto de 14 triunfos y un empate en el clásico. Ante Nacional, el único encuentro en que dejó unidades, fue en la fecha número 13. Antes ganó las primeras 12: 4-2 vs. Wanderers, 2-1 vs. Cerro, 3-0 vs. Racing, 3-1 vs. Tacuarembó, 3-1 vs. Liverpool, 3-2 vs. River Plate, 5-0 vs. Cerro Largo, 2-0 vs. Central Español, 2-1 vs. Rampla Juniors, 3-2 vs. Defensor, 3-1 vs. Cerrito y 2-1 vs. Fénix. Si habrá sido bueno y efectivo lo de ese Peñarol que con esas primeras 12 fechas ya le alcanzó para obtener el certamen.

Ramos ya lleva nueve al hilo, con la diferencia de que ya ganó el clásico, y está en la puerta de un récord. ¿Qué le queda en el camino? Juventud en el Campeón del Siglo, Danubio en Jardines y Plaza también como local para igualar la marca de Aguirre. Luego, River y Cerro como visitante y Racing en casa, para intentar superar esa marca y cerrar el Clausura y la Anual de la mejor manera. El Tanque Sisley (4-0), Liverpool (2-1), Boston River (1-0), Wanderers (2-0), Nacional (2-0), Fénix (3-0), Rampla Juniors (4-1), Defensor Sporting (3-1) y Sud América (3-2), ya quedaron para la estadística.

Tanto en 1999 como en 2010, Peñarol arrancó peleándola de atrás. En ambas oportunidades, los dos Apertura quedaron en manos del tradicional. Sin embargo, el aurinegro se terminó quedando las dos veces con la acumulada y luego ganando las finales. Ahora la situación cambia. Primero porque Defensor fue el equipo que se llevó la primera parte del año y segundo porque el conjunto de Eduardo Acevedo no afloja. Si bien está a cinco en el Clausura, en la Anual sigue como único líder con cuatro puntos de ventaja.

“Leo” armó un equipo que sale de memoria, consolidó una idea y con su nuevo Peñarol, quedó entre el “Gladiador” y la “Fiera”…

Así lo vivió el DT en el Clausura 2010:

“Estamos felices, porque ganamos todos los partidos y fuimos campeones anticipados faltando tres fechas, pero no podemos permitirnos festejar demasiado ni perder de vista el gran objetivo que es ser campeones uruguayos. Y para eso falta poco, pero mucho que hacer aún. Por eso no hubo vuelta olímpica ni festejos desmesurados. Queríamos este objetivo pero para poder pelear el otro. Esta campaña maravillosa ya está. Clasificamos a la Copa y ganamos 12 partidos de 12. Creo que eso va a quedar en la historia y no creo que haya nada que pueda empañarlo”, dijo Diego Aguirre, siete años atrás, luego de conseguir el Clausura y dejar la vara bien alta.