FRANCIA

Primero fue Neymar el que hizo su berrinche porque, a poco de llegar para ser la gran estrella de París Saint-Germain, quería patear los penales que hasta ese entonces tenía la responsabilidad de ejecutar el goleador histórico del club, Edinson Cavani. Luego el astro brasileño siguió con sus enojos porque los hinchas parecía que no lo apoyaban, posteriormente estuvo en el centro de la controversia por sus fiestas y finalmente porque, al no estar a gusto, hizo todas las movidas para volver al Barcelona.

Desde la llegada de Ney al PSG hubo constantes tormentas, porque a las que generó él se sumaron otras, como la salida que forzó Adrien Rabiot a Juventus o la más reciente sobre la frustrada marcha de Cavani a Atlético de Madrid. El uruguayo finalmente se quedó y jugó el sábado los últimos 20 minutos en la goleada 5-0 a Montpellier, pero se perdió cinco partidos mientras esperaba que se decidiera su futuro.

Cuando Leonardo (director deportivo) confirmó la permanencia del “Matador” todo pareció volver a la normalidad, pero la paz no parece estar hecha para París Saint-Germain.

El juego ante Montpellier ya estaba 5-0 a favor de PSG y el técnico Thomas Tuchel decidió sacar a Kylian Mbappé a los 68’ para darle ingreso a Mauro Icardi. Entonces apareció el berrinche del chico de 21 años que, pese a su juventud, ya es campeón del mundo con Francia.

Se encaró con el entrenador y le reprochó su salida, que por cierto no es la primera. Según la prensa francesa, Mbappé no se siente mimado y por eso en Madrid se frotan las manos, porque Real lo quiere cuanto antes y el delantero ya le ha hecho más de un guiño a Florentino Pérez. ¿Empezará la novela Mbappé?

"No es nada personal"

“No son imágenes buenas, pero no hay nada personal entre él y yo. Estas cosas pasan entre un jugador que no quiere salir y un entrenador que tiene sus razones. Hablé con Leonardo y con el grupo. Esto se queda en el vestuario”.Thomas Tuchel, DT de PSG