ESPAÑA

Este viernes pasaron por el estrado de la justicia española más futbolistas de Zaragoza y los primeros de Levante para declarar por el supuesto amaño en el partido que enfrentó a ambos equipos en 2011. Sin embargo, aún no fue el turno de los uruguayos Gustavo Munúa y Cristhian Stuani, quienes jugaban para el conjunto levantino por aquel entonces.

Carlos Diogo, defensor de Zaragoza en aquel encuentro, sí prestó su declaración el miércoles y admitió que se quedó con el dinero que le depositaron en su cuenta (el que luego el propio club maño les reclamó a los futbolistas que retiraran en su cuenta y se lo devolvieran en efectivo y con el que supuestamente se pagó a los jugadores de Levante para que se dejaran ganar), por lo cual no se le podría vincular a la sospechada maniobra de soborno.

Según lo informado por el catalán El Mundo Deportivo, las primeras declaraciones de los futbolistas de Levante no cambiaron el panorama y todo sigue en la nebulosa. Primero, los jugadores de Zaragoza que dieron su testimonio siguieron la línea de los que lo habían hecho antes en cuanto a que desconocen la existencia de que hubo un pago a futbolistas rivales. "Nunca cobramos nada en efectivo, las primeras eran normales y se iban ingresando por transferencia", dijo el argentino Leo Franco, arquero zaragozista por entonces.

Miguel Pallardó, Rubén Suárez, Manolo Reina, Wellington da Silva y Javi Venta fueron los que pasaron a declarar por Levante y negaron haber recibido dinero para perder. "Da Silva, quien en el partido estrelló un disparo en el palo, dijo que lo hizo "para meter gol, no iba a tirar para afuera".