Peñarol depende cada vez más de su juego y de sus goles. Los aurinegros golearon 4-1 a Sud América con goles del propio "Cachavacha", Nahitan Nández, Carlos Luque y Cristian Palacios. La IASA había puesto el 2-1 parcial por medio de Fernando Arismendi.

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Cada vez que toca la pelota hace la diferencia. Eso está claro. También que cuando pasa por él, Peñarol se arrima al arco rival. Y que cuando tiene para definir, como anoche, por ejemplo, rara vez perdona. 

Este Peñarol, es Forlán y diez más. Podrá gustar o no. Pero la realidad lo marca partido a partido. Diego tiene enorme incidencia en el juego, en la elaboración del fútbol, en el manejo de la pelota, y también pesa en la definición, porque tiene latigazos precisos tanto de derecha como de izquierda.

Peñarol volvió a mostrarse como un equipo netamente individualista. Carece de juego colectivo, de jugadas hilvanadas, de un estilo definido, de una idea, pero sale a flote con el peso y gravitación de sus hombres. Forlán es el que hace la diferencia. Toca, juega, hace jugar y también define.

Ayer, cuando el partido estaba cerrado y el gol no aparecía, abrió el camino de la victoria con un zurdazo fuerte, bajo, rasante, y colocó a Peñarol en ganancia tras pase de Zalayeta al borde del área grande. Iban 24 minutos de juego y Peñarol no la pasaba bien ante un Sud América que se había animado a ofenderlo, a atacarlo por las bandas.

Ese gol, llevó tranquilidad al aurinegro, y tuvo el sello de Forlán.
Por si eso fuera poco, ya en el inicio del segundo tiempo, con más espacios, y más libertad porque Sud América salió a buscar el partido, Peñarol fue Forlán-dependiente.

Pero el aurinegro no concretó. Siguió flaqueando en el fondo, fundamentalmente, por los laterales donde el “Vasquito” Aguirregaray no rinde lo que puede y Diogo ya no justifica su titularidad: no marca ni se proyecta.

Por ahí insistió Sud América y por la derecha llegó el penal de Valdez a Royón. El propio delantero lo ejecutó, pero apareció Guruceaga con una atajada clave, vital, que evitó la igualdad a los 51 minutos de partido.
Y otra vez apareció Forlán. Una jugada suya terminó en el punto penal con Nandez definiendo de volea. Fue el 2-0 a los 56 minutos, y tal como estaba el partido, parecía una diferencia demasiado larga para la IASA, sin embargo, acortó con gol de Arismendi a los 66 minutos tras yerros en el fondo aurinegro.

Bengoechea movió el banco y acertó. Con Luque y Palacios le dio velocidad y explosión al equipo. Forlán tuvo más espacios y metió pases notables. Fue el gran estratega, el jugador que hizo la gran diferencia. Dejó su huella cada vez que pisó el área, generó el tercero que terminó de plasmar el argentino Luque, y ambientó el cuarto, que concretó Palacios, pero armó casi todas las jugadas de gol de su equipo a lo largo del cotejo.

Su juego se pareció al de aquellos partidos con la Celeste en Sudáfrica 2010. Hizo todo bien y terminó siendo imparable para Sud América. Peñarol fue Forlán y diez más. No hay que darle más vueltas.

Estadio: Centenario

Jueces: Christian Ferreyra, Raúl Hartwig y Gustavo M.Lisboa.

Sud América: J. Irazún; M. Pereiro, E. Martínez, D. Molina, A. Argachá; F. Arismendi, F. Yantorno, J. Barboza, A. Luna (78' B. Foliados); N. Royón (66' B. Aldave) y G. Colman (85' F, Millacet). DT: Jorge Vivaldo.

Peñarol: G. Guruceaga; M. Aguirregaray, C. Valdez, E. Mac Eachen, Diogo; N. Nández, S. Píriz, L. Aguiar (71' N. Albarracín); M. Zalayeta (55' C. Luque), D. Forlán; y D. Ifrán (78' C. Palacios). DT: P. Bengoechea

Goles: 24' Forlán (P), 56' Nández (P), 66' Arismendi (SA), 73' Luque (P) y 89' Palacios (P)

Expulsados: 77' Argachá (P) y Albarracín (P)

Amarillas: Molina, Pereiro, Yantorno y Arismendi (SA)

Incidencia: a los 61' Guruceaga (P) le atajó un penal a Royón (SA)

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