Gutiérrez apronta la revancha sin hinchas; confesó que va a sentir la ausencia de sus fieles.

No se habla de venta previa, de aprontes de las tradicionales "fiestas" para recibir en la cancha a Nacional. Se habla de puertas cerradas y de los efectos que puede tener en el futuro inmediato de Nacional, adentro y afuera de la cancha. Por culpa de unos pocos, como suele pasar. Nacional va a extrañar a su hinchada ante Palestino, dicen los jugadores, aunque, sobre todo en el caso de Álvaro Gutiérrez, también se le busca la vuelta para que lo que aparenta ser muy malo, resulte no serlo tanto.

Sigue el debate, si se quiere, de cuánto perjudica a Nacional jugar el jueves sin público, por aquello de la presión que el público ejerce y que, dependiendo de las condiciones físicas, futbolísticas y anímicas, juega a favor o en contra de los intereses propios; como dejaron ver algunos dirigentes en la nota publicada por Ovación el sábado 7.

"Creo que nosotros muchas veces nos tenemos que abstraer, lamentablemente, de jugar con o sin público", comenzó diciendo Gutiérrez consultado sobre el tema. Y siguió explicando: "Muchas veces el público te incita a desesperarte e ir para delante siempre; pero sé que la hinchada de Nacional en este tipo de partidos acompaña, empuja y es como si fuera un jugador más. Vamos a sentir su ausencia, pero somos once contra once y sabemos que más allá que no estén presente en el recinto físico, van a estar alentando desde donde estén".

El jugador que irá de un extremo a otro en seis días es Gastón Pereiro, quien pasará de jugar el sábado con 52.000 personas alentando en el Centenario —donde la selección Sub 20 cayó ante Argentina— a hacerlo (al menos está a la orden) el jueves sin público en el Parque Central. "Jugar sin público no nos tiene que desviar del objetivo", dijo el volante ayer antes de la práctica... a puertas cerradas en el Parque.

"Va a ser difícil", afirmó Gonzalo Porras cuando se le mencionó el hecho de jugar sin público. "Pero tenemos otra motivación, que es pasar de fase y ahí sí tener a todos a nuestro favor en el Parque. Estamos muy bien", dijo el volante central, quien recordó que será la primera vez que juegue sin público. Lo será, en realidad, para todos.

Nacional va a extrañar a sus hinchas. Al menos en la sede cuando se hagan las cuentas, seguro. Adentro de la cancha, depende de los jugadores, los que ganan o pierden; siempre.

CSKA de Moscú jugó la Champions en 2014 sin público. Antes le había tocado a Atlético Madrid (con Forlán) en 2008 y a Roma en 2004, por ejemplo.

El equipo brasileño, en ese momento campeón de América, jugó en 2013 sin público por sanción ante Millonarios de Colombia. Fue victoria local 2 a 0.

En la Copa 2013, por incidentes provocados por sus hinchas en el Centenario, Vélez debió jugar sin público ante Peñarol en el Amalfitani. Y ganó 3-1.

El primer partido de la presente Copa Libertadores se jugó sin público en Lima. Alianza, el local, cayó derrotado por goleada ante los argentinos.

Pese a la molestia generada por algunos fallos arbitrales del paraguayo Antonio Arias en el partido de ida ante Palestino (como la expulsión de Polenta y la no expulsión del arquero rival cuando cortó juego fuera del área), los dirigentes de Nacional han decidido no iniciar acción alguna al respecto en las esferas de la Confederación Sudamericana.

Misma decisión se adoptó, por el momento, también en torno a la denuncia de insultos que hizo el jugador Diego Arismendi contra el árbitro de ese mismo encuentro.

Hoy se pondrá a consideración de la Asamblea de Socios el proyecto de ampliación del Gran Parque Central, por parte de la dirigencia tricolor. Eso incluye la aprobación de las formas de financiación de las obras.

Como se informara ayer en Ovación, el ambicioso proyecto requerirá, por ejemplo, que el estadio de Nacional esté cerrado durante un año, por más que la obra en sí va a llevar algunos meses más. En su nueva versión, el Parque Central tendrá 320 palcos y la capacidad aumentará considerablemente, así como los servicios que se prestarán en el mismo.

NACIONALDIEGO PÉREZ