TORNEO CLAUSURA

Peñarol no le pudo ganar en todo el año; contra Torque dejó ocho de los 19 puntos que perdió.

ÁNGEL ASTEGGIANTE

Si Peñarol finalmente al cierre de la temporada tiene que reprocharse por algún punto perdido, seguramente a todos se les vendrán a la mente los tres partidos que disputó con Torque. El aurinegro no solo no le pudo ganar a lo largo de toda la temporada, sino que solo sacó un punto de nueve posibles y en todos esos cotejos fue superado dentro de la cancha por el benjamín de la categoría.

Perdió 2-0 en el Apertura, cayó por 4-3 en el Intermedio y ayer empató 1-1 por el Clausura. Solo con este rival el aurinegro dejó ocho de los 19 puntos que cedió a lo largo de este Uruguayo; un 42%, casi la mitad.

La primera vez que se vieron las caras, Leonardo Ramos apostó por mandar a la cancha a Guillermo Varela y a Cristian Rodríguez, recién llegados de la gira por China con la selección. Se notó demasiado el desgaste físico que traían los dos jugadores y esa decisión causó polémica.

En el Intermedio, en tanto, el aurinegro llegó sin los futbolistas afectados a la selección y con un equipo algo diezmado por las lesiones.

Ayer ocurrió todo lo contrario. Peñarol llegó en alza tras la seguidilla de triunfos y con la posibilidad de defender por primera vez la punta de la Tabla Anual. Sin embargo, también volvió a dejar una pálida imagen.

“Tratamos de jugar todos los partidos igual. Creo que hoy fuimos superiores a Peñarol en la mayoría del juego, en situaciones de gol y en todo. Ellos se encontraron con un gol por un error nuestro y tuvieron otras opciones muy medidas. Nosotros tuvimos mucho mayor tiempo la pelota, tuvimos más circulación y más llegadas claras como para terminar ganando el primer tiempo y para empatar antes en el segundo tiempo”, señaló Pablo Marini.

En esa misma línea se manifestó Guzmán Pereira, uno de los referentes aurinegros: “No estuvimos bien pero seguimos dependiendo de nosotros, hay que estar tranquilos. Torque sabemos que es un equipo que juega muy bien, hizo su juego y nos complicó”.

Torque se transformó en una especie de martirio para el mirasol. Tiene solamente casi 11 años de vida como club y en su primera temporada en la máxima categoría, ya le complicó la vida en una, dos y tres oportunidades. De hecho, hasta dentro de un buen tiempo podrá sacar chapa con el historial ante Peñarol. Está dos partidos arriba y hasta ahora, no conoce la derrota.