PEÑAROL

“Cachila” Arias y “Maxi” Olivera quieren volver, pero cada caso presenta inconvenientes.

Ambos ya dejaron en claro sus ganas de retornar al club, pero la situación no es sencilla. Primero porque tanto Ramón Arias como Maximiliano Olivera tienen contrato en Al-Ettifaq y Fiorentina, respectivamente, y segundo porque Peñarol debe analizar si entran en los planes deportivos y principalmente, dentro del marco económico de la institución.

Formalmente la Comisión de Contrataciones se reunirá en estas horas con Carlos Sánchez para empezar a delinear el Peñarol 2019. Diego López, en Europa con su familia, está en línea directa con el “Tío”. La prioridad pasa por renovar los vínculos que se vencen a fin de año, pero sobre la mesa empezarán a sobrevolar puestos a reforzar y jugadores ofrecidos.

En lo que refiere a la defensa, hoy por hoy el aurinegro sabe que para esa zona de la cancha cuenta con Fabricio Formiliano. La idea es que Carlos Rodríguez siga, pero se debe negociar con Plaza Colonia. En Argentina hay clubes interesados en “Paco”. En el caso de Carlos Matheu todo se encamina a la rescisión. ¿Yeferson Quintana? Volvió de la MLS y se sumará al plantel. Será evaluado. Otra incógnita.

Una vez cerrado ese panorama, Peñarol determinará si hay lugar para los dos. Lo que está claro es que con la baja de Matheu, y teniendo en cuenta la doble competencia, quedará al menos una vacante para ocupar.

“Cachila” y “Maxi” tienen la ventaja del recuerdo cercano que dejaron en Peñarol. Si bien se criaron afuera, rápidamente se ganaron a la gente y se transformaron en referentes. Además, los acompañaron los éxitos deportivos.

En el caso de Arias, la contra radica en que debe negociar su salida del fútbol árabe. Es titular indiscutido y está nominado a mejor zaguero de la Liga. Hace seis meses, cuando el “Memo” arribó a Los Aromos, pidió por su continuidad. Si pega la vuelta deberá desechar dinero. En principio, depende más de él que de Peñarol.

Olivera, en tanto, no tiene ritmo de juego aunque se encuentra en buena forma física. Su último partido fue el 20 de mayo. La traba radica en que su vínculo con el equipo italiano va hasta mediados de 2022. Ya arregló de palabra su salida a préstamo para este período, pero el aurinegro no puede competir con el sueldo que allá percibe. En su caso, que también puede jugar como lateral izquierdo, cuenta con la contra de que tiene el mismo representante que Lucas Hernández (Grupo Casal). A los empresarios no les serviría que dos de sus jugadores se “pisen”.

¿Hay lugar para los dos? Todo está supeditado a las bajas que pueda tener el plantel y si encajan en el plan económico.

Por cinco meses no coincidieron en Peñarol. Cuando Arias desembarcó en Los Aromos, en el verano de 2017, Olivera ya se había marchado a la Fiorentina. De todos modos, sí se conocen. Ya estuvieron juntos en el plantel Sub 20 de Uruguay en 2011. Fueron al Sudamericano de Perú, donde la Celeste se quedó con el segundo puesto, y al Mundial de Colombia donde el equipo que dirigía Juan Verzeri quedó rápidamente eliminado en primera fase. En aquella selección, vale destacar, que “Cachila” se desempeñaba como zaguero y “Maxi” como lateral. De aquel plantel de Uruguay, hay un futbolista que hoy se encuentra defendiendo a Peñarol: Ignacio Lores.