MÉXICO

El delantero Nico López vive con expectativa el hecho de regresar a los campos en el próximo partido de Tigres frente a Pachuca, el próximo sábado 1° de agosto.

El "Diente" no jugó contra Necaxa (3-0) por precaución después de una lesión en el tobillo. El uruguayo realizó una recuperación en tiempo récord del golpe que recibió, donde le diagnosticaron al menos tres semanas sin entrenamientos hasta que pueda pisar el césped.

El "Diente" apareció haciendo actividades en el gimnasio dos semanas después, y luego corriendo por el centro de entrenamiento al lado del preparador físico. No tardó mucho en lograr las primeras sesiones de entrenamiento con la pelota y ese hecho le significó que pueda estar  disponible para el equipo al fin de semana. 

"Me siento bien, estaba listo para jugar el viernes pasado cuando fui cuidado. Hablo mucho con la sanidad y saben mi deseo de volver a jugar 
lo antes posible y ayudar a nuestro equipo. El deseo es enorme, me quedé por mucho tiempo sin jugar por la pandemia y poco después pasó lo de la lesión. Me dediqué mucho y terminé regresando más pronto, todo porque quiero estar en el campo", dijo el delantero. 

Antes de la pandemia, el delantero atravesó un período de adaptación al estilo del fútbol mexicano, después de cuatro temporadas en Brasil. Jugó sólo cinco partidos para el equipo, no teniendo la continuidad que tuvo en Internacional, un club donde el uruguayo se destacó al ser uno de los cuatro mejores anotadores extranjeros de la historia, con un total de 40
goles en 177 juegos.