Luis Enrique, entrenador del Barcelona, fragilizado por los malos resultados del equipo y por la crisis que vive el club, aseguró que cuenta con el apoyo del equipo y que cuando no sea así abandonará su cargo.

"Lo que puedo garantizar, es que el día que vea que mis jugadores no me siguen, dejo", dijo en conferencia de prensa previa al encuentro que el Barcelona disputará el domingo ante el Atlético de Madrid a la hora 18:00 en un partido que podría acabar decidiendo su futuro.

"Y esto todavía no se ha producido en mi carrera como entrenador", matizó.

Sobre las informaciones de prensa que indican que su relación con la estrella del equipo, el argentino Lionel Messi, no pasan por su mejor momento, el técnico comentó: "Hay muchas informaciones, algunas malintencionadas, pero yo no quiero entrar en ese juego peligroso".

Pese a la victoria el jueves ante el Elche por 5-0, en la ida de los octavos de final de la Copa del Rey, la posición de Luis Enrique sigue siendo muy cuestionada tras la derrota el pasado fin de semana ante la Real Sociedad (1-0) en un partido que comenzó con sus estrellas, Messi y Neymar, en el banquillo.

Esa decisión, que molestó a Messi, fue muy criticada por la prensa y fragilizó aún más la posición del asturiano de 44 años, que no ha logrado hasta ahora ni los resultados ni el juego que los aficionados azulgrana esperaban.

"Continúo centrado y motivado. No hay nada que me saque de mi camino ni me descentre. Todo lo que veo de puertas para dentro es algo que me motiva. Los jugadores y el cuerpo técnico nos mantenemos al margen de todo esto. Estamos acostumbrados", se defendió.

Sobre el partido ante el Atlético, Luis Enrique comentó que sólo están en juego tres puntos, "importantes, pero tres puntos".

"El Atlético no parece vulnerable. Acumula jugadores y defienden todos muy bien. No tendremos esa suerte. Espero que sea un partido como los del año pasado, aunque con un signo diferente. Deberemos atacar con criterio y defender muy bien. Será un partido muy complicado", añadió.

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