Publicidad

De la Cruz metió su primer gol en River

Compartir esta noticia
Nicolás De la Cruz festeja su gol con River Plate

ARGENTINA

El millonario remontó el partido contra Lanús y terminó goleando 5-1 pese a jugar con un equipo con gran mayoría de suplentes, en el encuentro que también fueron titulares Camilo Mayada y Rodrigo Mora, como capitán. El joven volante uruguayo también dio una asistencia.

Nicolás De la Cruz festeja su gol con River Plate
VEA EL VIDEO

River , envalentonado por el triunfo en el superclásico ante Boca, no afloja la marcha. Como visitante, le dio vuelta el partido a Lanús y lo goleó 5-1. Leandro Maciel abrió la cuenta del partido, y después Ignacio Scocco, Santiago Sosa - tras pegar la pelota en el palo y rebotar en la espalda del arquero Núñez -, Leandro Lollo, Nicolás de la Cruz y Exequiel Palacios anotaron los goles del equipo que dirige Marcelo Gallardo. Además, River extendió su invicto a 30 partidos.

Estar contra las cuerdas para reaccionar. Eso necesitó el alternativo River para comenzar a moldear su goleada 5-1 ante Lanús antes de poner su cabeza en la Copa Libertadores. Fueron 25 minutos iniciales de confusión y desorden defensivo que luego quedaron sepultados tras una recomposición general que le permitió dominar el juego, marcar superioridad y vapulear a su rival con mucho vuelo futbolístico. Con goles de Scocco, Ibáñez en contra, Lollo, De La Cruz y Palacios, el equipo de Marcelo Gallardo no necesitó a sus mejores nombres para estirar el invicto a 30 encuentros (19 victorias y 11 empates) y seguir escalando posiciones tras un pálido arranque en la Superliga.

El gol de Leandro Maciel, a los 16 minutos del primer tiempo, fue el quinto que le convirtieron a Franco Armani en los últimos 22 juegos (recibió 14 en 32). Pero además fue el regreso de un desafío que River había olvidado: tener que dar vuelta un resultado -la última vez había sido el 1° de abril en la victoria por 3-1 sobre Defensa y Justicia-. Así, el de anoche, fue el tercer partido de los 30 que lleva sin perder en el que debió reponerse, ya que también fue perdiendo en dos oportunidades en el empate 2-2 con Flamengo del 28 de febrero.

¿Cómo lo hizo ante Lanús? Con fútbol. Mucho fútbol para potenciarse de a poco hasta lograr un segundo tiempo brillante y contundente. Para eso, a los 27 minutos, necesitó el rápido empate 1-1. Y lo consiguió con una gran acción colectiva, repleta del ADN Gallardo aunque los intérpretes no sean los habituales titulares: fueron 15 toques de una jugada que fue de izquierda a derecha dos veces y que terminó en un centro de Moreira que bajó De La Cruz con la cabeza para que Scocco festeje con una certera media vuelta.

A partir de ese momento, River empezó a maquillar los marcados errores defensivos que no paraban de repetirse durante la media hora inicial, en la que se vio aturdido por los explosivos y veloces ataques del local, comandados por el juvenil De La Vega y el experimentado Acosta. Pero la poca respuesta del Granate ante el empate y su prolongado bajón futbolístico -suma dos puntos, no ganó en el torneo y es el equipo más goleado- le permitieron al Millonario olvidarse de lo sucedido y crecer para ser dueño absoluto del trámite del juego.

Más allá de que contó con una cuota de suerte, ya que el 2-1 fue un gol en contra del arquero Ibáñez tras un remate del juvenil Sosa que se estrelló en el palo, River logró todo lo que no había podido en las tres primeras fechas con los sucesivos empates 0-0 ante Huracán, Belgrano y Argentinos: mostrar contundencia para gustar y golear. El cabezazo de Lollo en un córner para el 3-1 sirvió de preludio para otras dos muy buenas jugadas colectivas que derivaron en los goles de De La Cruz y Palacios.

Además de los cinco goles, la victoria y la continuidad del invicto, Gallardo se lleva otras conclusiones positivas de la cancha de Lanús: el buen rendimiento del uruguayo De La Cruz, quien asistió, convirtió y pudo mostrar buenas pinceladas de juego -especialmente cuando se alejó de la banda y se juntó con Quintero-; la recuperación de Lollo, quien arrancó con problemas pero se afianzó y marcó su primer gol en River tras estar sin jugar más de cinco meses (su último partido había sido el 22 de abril en la victoria 3-0 con Arsenal); la oportuna aparición de Sosa, quien debió reemplazar a Enzo Pérez por lesión antes del final de la primera parte y mostró un gran nivel; y la ausencia de molestias físicas en posibles titulares frente a Independiente.

El último punto, claro, se enfoca exclusivamente en el objetivo del martes: derrotar a Independiente para lograr el boleto a las semifinales de la Copa Libertadores. Desde el domingo, el plantel se concentrará en Cardales para preparar el duelo copero. Consumada la victoria 5-1 ante Lanús, podrá hacerlo con tranquilidad y confianza, como pretendía el DT.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad