NUTRICIÓN

La forma en la que los deportistas se alimentan es clave para tener una buena salud y/o rendimiento físico. A través de distintas mediciones los especialistas en nutriciónpueden hacer un diagnóstico para trabajar con sus pacientes.

La licenciada en nutrición y columnista de Eme, Lorena Balerio, explicó a Ovación que “la antropometría es un método sencillo para conocer cómo está compuesto el cuerpo”. Para eso se toman las longitudes óseas, los perímetros musculares y la grasa y en función a ellos se analizan porcentajes en la composición corporal.

Estas mediciones fueron incorporadas por los equipos de fútbol para trazar objetivos para articular entrenamiento y alimentación, así cómo para evaluar cómo mejorar hábitos. Nacional, Peñarol y la selección uruguaya trabajan de esta manera.

Cecilia Betolaza es la nutricionista de Nacional desde hace seis años y su rol es seleccionar y elegir los mejores alimentos que complementen el trabajo de los futbolistas, en lo que los especialistas llaman “entrenamiento invisible”.

“La diferencia en lo que serían las personas que no son deportistas de élite es que eligen qué comer y existe un alto consumo de productos industrializados con alto contenido en grasas, carbohidratos refinados o productos ultraprocesados”, indicó la licenciada en Nutrición.

Y advirtió: “Con los deportistas tenemos que tomar un decisión sobre qué elegir. Por ejemplo, pensar en grasas de buena calidad. En tanto, el nutriente primordial son los carbohidratos y priorizamos los integrales como arroz o puede ser quinoa. No es algo que puedan elegir o no, es algo que ellos tienen que aprender porque hay mucha competencia”.

La especialista del equipo tricolor indicó que en la institución se propone que coman allí. Para el menú de los futbolistas eligen: carnes bajas en grasa, pescado (al menos dos veces por semana), carbohidratos vegetales y muchos vegetales por su acción antioxidante, dado que el fútbol oxida.

“El deportista tiene una composición corporal, que refiere al peso de grasa, músculo y hueso, que se debe conocer para diseñar el plan nutricional a seguir. Tiene que ser una alimentación guiada, calculada según los esfuerzos que se hagan, el día de la semana o etapa de la temporada en que se encuentren ”, explicó.

Betolaza señaló que muchas veces usa suplementos para apoyar la alimentación de los profesionales y que los principales son el whey protein (proteína de suero de leche), la creatina y también otros aliados naturales como el jugo de remolacha, que tiene un efecto que mejora la capacidad física de los deportistas a través de la resistencia muscular y aeróbica.

“Hay que estar atrás de ellos para que cumplan con consumo de fruta luego del ejercicio y que enseguida de entrenamiento, a la hora que el metabolismo está más activo, consuman los nutrientes necesarios así como su whey protein o creatina”, puntualizó.

La alimentación es clave para recuperar el músculo también, además del descanso agregó.

Betolaza detalló que siempre que se ofrece la comida al plantel se hace la misma para todos, pero que hay opciones y que los nutricionistas tienen la tarea de orientar e indicar cuáles son sus porciones.

“Hacemos un seguimiento personalizado que contempla factores deportivos y sociales para que tengan un mejor rendimiento”, subrayó.

Victoria Correia trabaja como nutricionista del equipo de sanidad de Peñarol desde el año 2013 y ha visto pasar muchos técnicos por los aurinegros. Sin embargo, el rol de una especialista en alimentación permanece.

Correia explicó que al momento de diseñar la alimentación de un futbolista o cualquier deportista se tiene en cuenta cuáles son los requerimientos energéticos, así como factores referidos a la competencia, la vida fuera de la cancha (que engloba desde sus gustos hasta sus restricciones alimenticias) y cuestiones ambientales como la estación del año.

“El futbolista obtendrá su energía de los carbohidratos que serán su combustible y cuya demanda estará aumentada respecto a lo de una persona que no se ejercita a nivel profesional”, señaló.

La cantidad de carbohidratos que cada deportista necesita depende de qué momento están: si son titulares, están en temporada, juegan una o dos veces por semana, etc.

Respecto a las proteínas, la experta sostuvo que en general el consumo es igual al que el resto de la población y que puede aumentar en función de si se busca aumentar, mantener la musculatura o recuperarla y prevenir lesiones.

En cuanto a las grasas, sostuvo que esto no dista del vínculo que cualquier persona que quiera alimentarse saludablemente debe tener: la clave está en elegir cuáles son las de mejor calidad.

“Hay que bajar el consumo de grasas saturadas provenientes de fuentes de animales y aumentar lo que son las grasas buenas o de origen vegetal, como aceites, frutos secos o palta, por ejemplo”, indicó.

Correia remarcó que otro de los pilares de la nutrición de los deportistas profesionales es el consumo de agua.

Respecto a los suplementos, dijo que primero se debe intentar cubrir todas las necesidades con la alimentación y luego pensar en esos apoyos. “El batido proteico no siempre en necesario, pero sí es un plus. Es una ayuda y su origen está en los alimentos”, sostuvo.

Sobre su trabajo en Peñarol, explicó que se hace un paneo general del plantel y luego se va adaptando en función de los casos más puntuales que necesiten que se preste atención o que tenga algún requerimientos especial.

Para la especialista, la comunicación fluida y el trabajo en conjunto con el departamento físico es fundamental para obtener buenos resultados. “Es clave también trabajar en el entrenamiento invisible, que son los hábitos nutricionales, de higiene y de sueño”, destacó.

Además, sostuvo que la competencia en los últimos años es muy fuerte y los futbolistas son más conscientes de la importancia de cuidarse en este aspecto.

Emiliana Clemente se desempeña como nutricionista de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Federación Uruguaya de Básquetbol (FUBB) y Defensor Sporting. Su tarea es compleja, especialmente en lo que refiere a selección porque implica mucho trabajo a distancia y viajes.

“El menú del grupo es súper delicado de armar, porque entran en juego mil factores, como los hábitos, costumbres y cultura del equipo”, detalló y añadió que otro de los desafíos tiene que ver con los objetivos personales de cada futbolista: “En el mismo plantel tenemos jugadores que están en proceso de aumento de peso, otros en descenso de masa grasa y otros en plan rendimiento”, remarcó.

Esas no son las únicas dificultades, los tipos de dietas, los cocineros, los horarios y más factores inciden en el diseño del menú de un grupo, explicó la nutricionista.

Clemente trabaja con Defensor Sporting y la selección: “Es muy diferente trabajar con deportistas de selección que con planteles locales. Desde el vamos, está el tipo de trabajo, la frecuencia y las responsabilidades por contrato. ¿Qué significa esto? Los equipos locales contratan nutricionista, generalmente, con una menor frecuencia o volumen de trabajo (por temas económicos) y se trabaja todo el año. En las selecciones, tanto de fútbol como básquetbol, lo hacemos por “ventanas” o períodos de tiempo donde la selección se junta a entrenar y jugar, ya sean amistosos o partidos oficiales. Pero estas ventanas suelen ser de una semana, 10 o 15 días, y ahora en noviembre será de aproximadamente un mes, si Dios quiere hasta la final del Mundial”.

El trabajo en los seleccionados de Clemente incluye los aspectos relacionados con la nutrición deportiva, armado de menús, preparado de suplementación diaria (que generalmente no es la misma para todo el plantel), mediciones antropométricas con informes para los jugadores, cuerpo técnico e inclusive sus equipos oficiales, así como armado de snacks en mitad y post entrenamientos.

“Cuando hay ventanas de selección, trabajamos desde las 7:00 hasta las 23:00 horas sin descanso. Es intenso, preciso, detallado y exigente”, confesó.

Los seguimientos en el exterior se hacen a través de internet y en general cada deportista tiene otro especialista en el país donde juega. “Sí sigo a algunos que me piden puntualmente, y lo hago con las mediciones (antropométricas) que les hace su club, y consultas por videollamada”, explicó.

“Está demostrado científicamente, que la buena nutrición mejora el rendimiento deportivo y en los deportistas de élite, o alto rendimiento, es una ventaja que no pueden perder”, concluyó.