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Claudia Umpiérrez tras el estreno en Champions de Frappart: "fue un día histórico"

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Umpierrez

CHAMPIONS LEAGUE

La jueza uruguaya estuvo pegada al televisor mirando el partido de Champions League que dirigió su colega y amiga la francesa Stéphanie Frappart.

El partido entre Juventus y Dinamo de Kiev disputado ayer quedará para la historia de la Champions League porque fue el primer partido de la competencia europea arbitrado por una mujer: la francesa Stéphanie Frappart.

Muy lejos del Juventus Stadium, Claudia Umpiérrez se sentó frente al televisor para ver arbitrar a su colega y amiga.

Es más, Umpiérrez y su compañera, la asistente Luciana Mascarañas, tienen un grupo de Whatsapp con varias colegas de diferentes países, Chile, México y Honduras donde también está Frappart, a quien conoció en el Mundial de Portugal 2015.

“Fue un día histórico. Stéphanie sigue haciendo historia. Nos enteramos por ella en el grupo que iba a dirigir en Champions, antes de que fuera público. Y hoy (ayer) estábamos todas muy contentas escribiendo en el grupo y mandando fotos de cuando salió a la cancha”, contó Umpiérrez.

“Nos sentimos todas muy orgullosas porque nadie le regaló nada. Le están dando el premio a su trabajo. Todo lo consiguió a base de mucho laburo y sacrificio. Con este partido que hizo se volvió a demostrar que el arbitraje no tiene género, que es un tema de capacidad”, añadió la jueza, que es candidata a presidir Audaf.

Frappart
Frappart ayer en la victoria de Juventus frente a Dinamo de Kiev por 3 a 0 en Champions.

“Hizo un gran partido, vuela físicamente, es más veloz que los jugadores y lo disciplinario lo manejó muy bien”, analizó Umpiérrez. “No me sorprendió para nada porque cuando la conocí en el 2015 ya se notaba su gran estado físico, su buena madera y te dabas cuenta que iba a hacer historia”.

A esta altura y gracias a sus colegas de habla hispana, la francesa entiende cada vez más el español. Aunque suele escribir en inglés en el grupo de Whatsapp que comparten, las demás le responden en español porque saben que comprende. “Ya habla bastante español, lo aprendió sólo para poder estar en el grupo que tenemos nosotras y las árbitras de Concacaf”.

Cabe recordar que en el Mundial de Francia, que se diputó el año pasado, Umpiérrez y Mascarañas volvieron a coincidir con Frappart. En esa Copa del Mundo, la uruguaya dirigió el partido inaugural y fue cuarta árbitra en la final entre Estados Unidos y Holanda, que justamente arbitró Frappart.

En la víspera, al ver a su colega dirigiendo un partido de la Champions League, Umpiérrez no pudo evitar imaginarse dirigiendo alguna vez un encuentro de Copa Libertadores.

“Es un sueño”, reconoció. Pero no es el único. Aún espera dirigir un clásico. Es que a pesar de sus éxitos a nivel internacional, recién ha arbitrado un partido oficial de un grande. Fue en septiembre del año pasado en Las Piedras, en el juego entre Peñarol y Juventud y salvó con buena nota. La oportunidad le llegó tras cuatro años en la máxima categoría y habiendo dirigido dos mundiales femeninos.

Aún le quedan varios sueños por cumplir, pero gracias a Frappart los ve más cercanos.

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