El volante notó que hoy los chicos ya no respetan a los grandes: “si te descuidas te pueden hacer tres goles”

Llegó a la sala de prensa de Los Aromos, se sentó frente al micrófono y antes de responder, tiró: "qué temprano que es esto. Algunos siguen de largo, ¿no?".

Luego, ya más en serio, contó cómo se sintió al sumar sus primeros minutos (jugó 28 el sábado frente a Liverpool) ya de vuelta en el fútbol uruguayo. "Estoy muy contento a pesar del resultado, aunque no pudimos ganar. Lo intentamos, pero son cosas que pasan en el fútbol".

Muchos de los jugadores que regresan tras muchos años en el exterior, reconocen que volver a adaptarse al fútbol uruguayo no es sencillo. En su primera vez en el plantel, al volver tras 14 años afuera de Uruguay, al "Cebolla" le tocó salir a una cancha chica. "Fue raro, los compañeros me miraban por el tema del vestuario que es muy chico y uno de repente estaba acostumbrado a otra cosa. Pero no cambia mucho. Es un estadio chico, pero la cancha estaba muy linda. Me estoy adaptando rápido y estoy muy contento", relató el lacazino.

Luego, con su sinceridad de siempre, contó que terminó muy cansado en Belvedere. "Me sentí ahogado, esa es la palabra exacta. Me tocó jugar unos minutos, porque recién estoy preparándome en lo físico. Me falta, venimos trabajando de a poco. Todavía no estoy para 90 minutos. Mejor llevarlo así, porque es un campeonato largo. Mejor ir despacio y no apurarnos. Como ya me ha pasado. Terminé con una lesión en Independiente, estuve un mes parado y con la rescisión del contrato se demoraron las cosas. Recién me estoy poniendo al día".

Y reconoció que este regreso fue muy diferente a su debut en la Primera de Peñarol cuando todavía era un chiquilín. "Esto es diferente, hoy tengo otro recorrido y más años. Estoy más maduro".

El próximo domingo los carboneros reciben a Boston River en el Campeón del Siglo. Aunque durante varios tramos de su conferencia dio la impresión que aún no está pronto para arrancar como titular, el "Cebolla" quiere jugar por primera vez en el estadio que tantas veces vio de lejos sentado frente a la computadora. "No se si voy a ser titular o no, pero quiero estar. Tengo muchas ganas, y va a ser algo muy emocionante para mí, después de ver siempre por internet los partidos en el nuevo estadio. Y siempre con muchísimas ganas de poder estar ahí con el público. Nunca pude jugar en el Campeón del Siglo. Va a ser algo muy lindo, ojalá que salga todo bien y que sea bien recibido", se ilusionó.

Con respecto a si prefería salir como titular y luego ser sustituido o entrar desde el banco para tener la chance de cambiar las cosas, respondió: "Yo estoy a disposición del entrenador, si me toca entrar de arranque, voy a poner todo de mí, pero aún no me siento bien del todo físicamente. Mejor llevarla despacio", insistió.

"No sé mucho del rival", admitió sobre el equipo de Alejandro Apud. "Pero todos los equipos quieren hacer el partido del año frente a nosotros. Vienen a hacer su mejor partido. Todos nos quieren ganar. Hay que estar muy atentos y tener cuidado. Por ahí de afuera el fútbol uruguayo se ve distinto. Los equipos chicos nos quieren ganar siempre, tenemos que entrenar el doble y no descuidarnos porque si no te pueden hacer tres o cuatro goles. No es como antes que a los grandes los respetaban más".

De todas formas, dijo que veía muy bien a Peñarol. "Al equipo lo veo muy motivado después de la mala racha que tuvo la temporada pasada".

Tras referirse a su amistad con los hoy tricolores Jorge Fucile y Álvaro "Tata" González "más allá de la rivalidad hay amistad de por medio". Y de admitir que estaba involucrado en la lucha de los futbolistas con la actual directiva de la Mutual, "uno lo que quiere es hacer un bien para los jugadores y el fútbol uruguayo", contó que ahora vive en Montevideo aunque seguramente preferiría estar en sus pagos.

"La idea era ir y venir todos los días de Juan Lacaze, pero son 139 kilómetros y te cansa", reconoció. Además, su hija mayor Lola, debe comenzar el colegio. "Pero cuando tenga un día libre, me voy para el pueblo", aclaró.

Después del empate de su equipo en Belvedere, Leonardo Ramos vio tres veces el partido ante los negriazules. Analizó las posibilidades de gol que tuvo su equipo y ese aspecto lo dejó conforme. También concluyó que Nández no toca la jugador de Liverpool cuando lo expulsan. Con respecto a quien puede sustituir al capitán, aún no lo ha decidido. Tiene que cambiar varias piezas y no se descarta que alguna pueda ser de la ofensiva.

Con respecto a lo que pasó en Belvedere, cuando Marcel Novick salió lesionado, el técnico intentó levantarle el ánimo. "El problema fue que pusiste el turbo Pelado, y se te desarmó la carrocería", le dio al volante que no deja de sorprenderlo por su entereza.

A propósito de Ramos incorporó a dos psicólogos a su cuerpo técnico. Se trata de Christian De Los Santos e Ignacio López quienes ya había trabajando con el técnico en Danubio. El "Team Building", fue una idea que acercó al club de la Curva de Maroñas su gerente deportivo Pablo Lima y que dio muy buenos resultados. Es más los profesionales consultaron al "Bola" Lima antes de "pasar" a Peñarol.

Ayer hubo reunión del Consejo Directivo, ya con la presencia del presidente Juan Pedro Damiani, quien regresó junto a Rodolfo Catino de su viaje a España.

A propósito de ese viaje, el tema del convenio por juveniles que se hará con Barcelona fue uno de los que se trataron en la reunión de la víspera. Si bien los términos de dicho convenio, no se han dado a conocer porque el anuncio se hará en forma conjunta en las dos paginas web de los clubes, se trataría de un intercambio de jugadores juveniles, técnicos, preparadores físicos, kinesiólogos y administrativos entre las formativas de ambas instituciones.

Todo esto surgió a raíz del pase de Santiago Bueno al equipo catalán. El zaguero juvenil viajará esta mañana hacia Barcelona donde se incorporará a la Masia del equipo culé.

Otro tema que estuvo sobre la mesa en el Consejo Directivo fue el Consejo de Liga que tendrá lugar en la presente jornada y donde se decidirá cuando se jugará el clásico. La idea de los carboneros es que el partido frente a Nacional se cambie para la fecha 12 o 13. El punto es que en la 13, los dos grandes son locales, ante River Plate, Peñarol y con Rampla Nacional y eso facilitaría las cosas.

Marcel Novick estuvo ayer en Los Aromos trabajando adentro tras la confirmación de su desgarro. El "Vikingo" no se quiebra y ya puso la cabeza en la recuperación. Su lugar en la oncena será para Ángel Rodríguez.

Matías Mier está con una contractura y la sanidad está pendiente de su evolución día a día para ver si llega al domingo. Ayer cumplió con buen parte del entrenamiento en forma normal y al final, trabajó un rato diferenciado.

Leonardo Ramos jugó en Peñarol en el año 2004. Había cruzado el charco en 1992 tras ser Campeón Uruguayo con Progreso y regresó tras catorce años jugando en el exterior, para vestir la aurinegra. Allí fue compañero del "Cebolla". Es más, el entonces volante y el juvenil concentraron juntos todo el año. "Si lo conoceré al Cebolla", dice el entrenador. Trece años más tarde Ramos y el lacazino volvieron a encontrarse, aunque hoy ya no comparten habitación por obvias razones. El papel de "Leo" es otro. Se conocen tanto, que aunque el "Cebolla" estaba advertido, porque ya lo habían conversado, de que iba a ingresar en Belvedere en algún momento del segundo tiempo, apenas el técnico lo miró, el volante asintió con la cabeza y pegó un salto desde el banco.

SILVIA PÉREZ

PEÑAROLSILVIA PÉREZ